En la sesión asiática del martes, el dólar estadounidense volvió a perder terreno. El índice del dólar estadounidense ICE, que mide el dólar estadounidense frente a una canasta de seis monedas principales, cayó un 0.4%. Generalmente, perdió 1.3% en agosto. Al mismo tiempo, el índice WSJ Dollar también cayó frente a la canasta de dieciséis monedas en un 0.4%.
En marzo, el dólar estadounidense alcanzó su nivel más alto en medio de una creciente demanda de activos de refugio seguro. Fue la primera reacción de los mercados financieros a la pandemia de coronavirus. Entonces, la moneda estadounidense comenzó a caerse. Hoy, las sombrías perspectivas de la recuperación económica de Estados Unidos impiden que el dólar estadounidense gane, señaló el Financial Times.
El EUR/USD subió un 0.39% para cotizar a $1.1983. Durante la sesión, el euro se acercó al nivel psicológicamente importante de $1.2.
A pesar de la depreciación del dólar estadounidense, los datos sobre el gasto y los ingresos de los consumidores en EE.UU. superaron todas las expectativas. Los analistas de Wells Fargo creen que el aumento del gasto aceleraría el ritmo de la recuperación económica. El viernes, esta cifra aumentó un 0.4%, aunque se esperaba que creciera solo un 0.2%. Esto sugiere que habrá un gran crecimiento del PIB en el tercer trimestre. A los tipos actuales, el PIB podría llegar al 35% en términos anuales. Sin embargo, en medio de la nueva ola del coronavirus, pueden ocurrir algunos recortes de costos en los mercados, especialmente en el sector de servicios.
Frente al yen japonés, el euro subió a 126,72. Sin embargo, el dólar mostró lo contrario. Cayó un 0.15% a 105.75 yenes.
El GBP/USD subió un 0.26% para negociarse a $1,3405. El dólar estadounidense sigue débil tras declaraciones de la Reserva Federal. Este es el impulsor clave del par. Por cierto, el comienzo del año escolar ayudará a impulsar el PIB del Reino Unido. Se ha levantado la cuarentena en el Reino Unido para que los estudiantes puedan ir libremente a la escuela y los padres vuelvan a sus trabajos. Sin duda, esto tendrá un efecto positivo en la recuperación económica. Los expertos sugieren un aumento de la actividad empresarial en sectores clave de la economía del país. Por lo tanto, la libra puede recibir apoyo adicional. Es por eso que los expertos predijeron un mayor crecimiento de la moneda.
El dólar australiano no se queda atrás. Creció un 0.3% a 0,7398 dólares. El Banco de la Reserva de Australia recortó su tasa de interés de referencia a un mínimo histórico de 0.25%. Y el rendimiento objetivo de los bonos del Estado a tres años se mantiene en 0.25%.
El jefe del RBA, Philip Lowe, espera que las tasas se mantengan "excepcionalmente bajas" durante algún tiempo.
El dólar estadounidense cayó frente al yuan un 0.4% a 6.8210 yuanes.
En China, la demanda tanto externa como interna está creciendo. Como resultado, el índice de gerentes de compras en el sector industrial de China, calculado por Caixin Media Co. y Markit, ha subido al nivel más alto por primera vez desde enero de 2011.
En agosto, esta cifra alcanzó los 53.1 puntos. Sin embargo, según Trading Economics, los analistas esperaban que cayera a 52.6.