El rendimiento de los bonos el gobierno con un plazo de vencimiento de 10 años subirá en 2019 a niveles que no se han visto desde 2010. Este pronóstico es dado por los representantes del fondo de bonos australianos Daintree Capital, que invierte en las deudas de países desarrollados. Sin embargo, es probable que el crecimiento posterior del dólar estadounidense sea moderado, según el fondo.
Una parte significativa del crecimiento del dólar se debió al estímulo fiscal. Después de las elecciones de medio término, que dividieron al Congreso de los Estados Unidos, el problema con más incentivos quedó en el aire", dijo Justin Tyler, gerente de cartera y director del departamento de Tasas de interés y monedas en Daintree.
Para activos de riesgo, un avance en las negociaciones comerciales después de las elecciones de ayer sería muy útil. Hacer un trato volverá a aumentar la rentabilidad, ya que esto "eliminará el factor de riesgo para la economía", dice Tyler. Según sus estimaciones, a fines del próximo año, el rendimiento de la "década" alcanzará el 3.60% - 3.80%. El crecimiento por encima de estas marcas será frenado hasta que aumente la demanda global.
El Daintree no excluye que la Fed en 2019 aumentará las tasas de interés 4 veces.
"Probablemente quieran que la política sea restrictiva, porque cuando ocurra la próxima recesión, tendrán algún tipo de pista de aterrizaje para estimular la actividad económica", comenta Tyler.
En cuanto al endurecimiento de la política en diciembre, casi se tiene en cuenta. Lo más importante es la tonalidad de la declaración y el curso que se tomará el próximo año.
"Si no todos, entonces la mayoría de los cambios en la aplicación se presentarán en el primer párrafo. Los funcionarios reguladores pueden decir que la actividad económica se ha vuelto un poco más moderada, pero sigue siendo fuerte o sostenible", espera el ex economista de la Reserva Federal Roberto Perley.
A corto plazo, el dólar se negociará con un ojo en el crecimiento de los rendimientos de la tesorería en el contexto de las expectativas de nuevos aumentos en las tasas de la Fed. Las elecciones en los Estados Unidos han terminado y los operadores se centrarán nuevamente en los datos macroeconómicos.