Bitcoin alcanzando una tasa superior a los $50.000 dólares, es una señal de que la criptomoneda está ganando reconocimiento entre los grandes inversores y empresas.
De hecho, Tesla, una de las compañías automotrices más grandes, dijo que algún día aceptará Bitcoins como forma de pago, como resultado de lo cual la tasa de la criptomoneda subió, colocándola así en los balances de la compañía y en Wall Street.
Sin embargo, incluso si Bitcoin se está popularizando, las criptomonedas todavía están sujetas a un escrutinio disperso en todo el mundo, principalmente debido a la falta de claridad en la regulación y los vínculos con el crimen.
En enero, la secretaria del Tesoro de Estados Unidos, Janet Yellen, y la presidenta del Banco Central Europeo, Christine Lagarde, pidieron una supervisión más estricta de Bitcoin por preocupaciones sobre su uso con fines delictivos, como el lavado de dinero.
A pesar de eso, el interés en Bitcoin sigue creciendo y se ve impulsado por las especulaciones de los analistas de que su oferta limitada podría aumentar las ganancias.
También se habla de que se está convirtiendo en "oro digital", especialmente porque los inversores predicen una inflación inminente, basándose en los bancos centrales y los gobiernos que buscan estimular la economía en términos monetarios.
Pero el presidente de la Fed de St. Louis, James Bullard, dijo que las afirmaciones de que Bitcoin rivalice con el oro no amenazan el dominio del dólar.
En cualquier caso, JPMorgan dijo que Bitcoin es ahora un competidor del oro y podría crecer a $146.000 si se convierte en un activo de refugio seguro.
"La visión fundamental de que Bitcoin es viable para los inversores y un activo de tesorería para las corporaciones continúa ganando terreno", dijo James Butterfill, estratega de inversiones de CoinShares.
Y con una criptomoneda valorada en aproximadamente $1,5 billones, los inversores están convencidos de que es una buena idea poseer Bitcoin u otras criptomonedas.
