El metal precioso se cotiza nuevamente por encima del nivel clave de $1,800. El oro tardó dos semanas en alcanzar el máximo. Una fuerte caída del dólar también ayudó a que el oro subiera.
Ayer, el índice del dólar estadounidense perdió un 0,5%. Desde este punto de vista, el oro que está en una relación inversa con el dólar estadounidense se disparó.
El lunes, la cotización se disparó un 1,3%, o $22.30. Como resultado, el metal precioso rompió la barrera de los $1,800. La última vez que la cotización se negoció a este nivel fue el 6 de agosto. El precio cerró en $1,806.30 al final del día de negociación.
El oro ha sido alcista durante dos sesiones consecutivas. El viernes pasado, el precio subió un 0,05% debido a un dólar estadounidense más fuerte.
En general, el metal precioso se fortaleció durante el transcurso de la semana anterior. Ganó un 0,3% en medio de la incertidumbre sobre el futuro de Afganistán y la rápida propagación del coronavirus en todo el mundo.
Estos dos factores proporcionaron soporte al oro al comienzo de la nueva semana de negociación. Debido al creciente número de nuevas infecciones por Delta, el apetito por el riesgo disminuyó. Una rápida propagación de la nueva variante de la COVID-19 representa una amenaza para la recuperación económica mundial. Al mismo tiempo, aumentó la demanda de activos de refugio seguro como el oro.
En particular, un dólar más débil impulsó el precio del oro el lunes. La moneda estadounidense fue alcista la semana anterior después de la publicación de las actas moderadas del FOMC. Sin embargo, a principios de esta semana, el dólar bajó.
El dólar estadounidense se revirtió antes del próximo simposio en Jackson Hole programado para el 26 y 28 de agosto. Se espera que el presidente de la Fed, Jerome Powell, comente sobre la posibilidad de una reducción gradual durante el evento.
Muchos analistas se inclinan a creer que el regulador continuará con su política monetaria moderada en medio de las crecientes preocupaciones por el coronavirus. En tal caso, el dólar puede caer. Por el contrario, el oro aumentará de valor.
Se espera que el metal precioso se mantenga por encima de los $1,800 en el corto plazo. La incertidumbre sobre el futuro de la reducción anticipada por parte de la Reserva Federal será el factor clave que proporcionará apoyo al oro.
Mientras tanto, hoy comenzó una corrección. Al cierre de este artículo, el metal precioso perdió un 0,11%, o $1.95, y cotizaba a $1,804.35.
La plata también cayó. El martes, el activo cayó un 0,23% a $23,602 en comparación con su cierre anterior cuando el precio aumentó un 2,4%. Además, otros metales preciosos populares subieron ayer.
El cobre subió un 2,4% a $4.24. El platino ganó un 2% y se negoció a $1,014.10. Al mismo tiempo, el paladio se disparó un 4,8% a $2,385.10 el 23 de agosto. El activo recuperó sus pérdidas durante cinco días hábiles.
