La Agencia Internacional de Energía (AIE) dijo que solo en octubre se recuperará el suministro de petróleo porque las pérdidas de producción debido al huracán Ida anularán el crecimiento de la producción en la OPEP.
Según el informe mensual de la agencia, la oferta y la demanda deben coincidir, por lo que, si la OPEP continúa aumentando la producción, los consumidores también deberían haber visto un aumento en las cifras. Pero en agosto, los envíos globales cayeron 540.000 barriles por día, y en septiembre deberían permanecer en el mismo nivel debido a interrupciones inesperadas.
Afortunadamente, la caída en la oferta no tuvo un gran impacto en los precios porque la demanda global ha estado cayendo desde julio en medio de un aumento de casos de COVID-19. Esto provocó limitaciones de movilidad en Asia, por no mencionar que durante la mayor parte de este mes, el precio del petróleo en Nueva York fue de alrededor de $70 el barril.
La AIE dijo que el consumo mundial mensual disminuirá aún más en un promedio de 310.000 b/d, pero ya hay indicios de que la propagación del coronavirus está disminuyendo. Por lo tanto, existe la posibilidad de que la demanda se dispare en 1,6 millones de b/d el próximo mes y continúe hasta fin de año.
Pero los cambios correspondientes en la oferta y la demanda significaron que la tendencia predominante en el mercado del petróleo este año, la disminución de las reservas, no ha disminuido. Según estimaciones preliminares de la AIE, las reservas de combustible en los países desarrollados cayeron en 30 millones de barriles en agosto. Esto es 186 millones de barriles por debajo del promedio de los últimos cinco años.
El huracán Ida, que azotó la costa del Golfo el 29 de agosto, también detuvo la producción de alrededor de 1,7 millones de barriles de petróleo por día. Pero durante las próximas semanas, la industria reiniciará muchos de los yacimientos afectados. No obstante, la AIE espera que la producción caiga en promedio 650.000 b/d en septiembre.
La pérdida total de suministro es de aproximadamente 30 millones de barriles, lo que convierte a Ida en el huracán más destructivo que ha azotado la industria desde Katrina y Rita en 2005.
Mientras tanto, otra tormenta llamada Nicholas azotó la costa de Texas el martes y podría causar inundaciones en Houston y partes de Luisiana.
Hablando de la OPEP, la producción total en agosto cayó 150.000 b/d a 41,58 millones de barriles, debido a que los aumentos en los suministros de Arabia Saudita, Irak y Rusia no compensaron las pérdidas en Nigeria, Kazajstán y México.
Así, en septiembre, el grupo planea recuperar 400,000 b/d adicionales de tiempo de inactividad, pero miembros como Nigeria, Angola y Malasia continúan luchando para aumentar la producción.