Según el historiador del petróleo Daniel Yergin, es probable que Estados Unidos pida a los países miembros de la OPEP que bombeen más petróleo para reducir la subida de los precios de la energía. El gobierno de Biden no tiene muchas herramientas para hacer frente a la actual subida de precios. Ya en agosto, la administración Biden pidió a Arabia Saudí que aumentara el suministro de petróleo en los mercados mundiales.
Los contratos futuros del petróleo, que han subido por encima de los 80 dólares el barril, también podrían alcanzar los 90 dólares porque Asia y Europa utilizarán más combustible para generar electricidad y calefacción, sustituyendo al gas natural, más caro
a limitación del suministro de gas ha provocado una subida de los precios en medio de la creciente preocupación por el próximo invierno. Esto ha agravado los problemas de inflación y ha amenazado la recuperación económica de la pandemia.
Según Yergin, aunque la mayoría de las centrales eléctricas no pueden cambiar de gas a petróleo, los generadores de doble calefacción tienen cierta flexibilidad.
Aunque el gobierno de Biden aboga por una transición más rápida a las energías renovables, la crisis que asola Europa y Asia podría llevar a reconsiderar seriamente el calendario de recortes en el uso de los combustibles fósiles, ya que las alternativas actuales aún no son capaces de sustituirlos totalmente.
Pero además, según Daniel Yergin, es poco probable que Estados Unidos racione la demanda de gas natural mediante cortes de electricidad.
