Los indicadores bursátiles europeos cayeron el lunes, siguiendo los índices de Asia-Pacífico. Así, el índice regional compuesto cayó un 0,5%, el DAX alemán perdió un 0,52%, el CAC 40 francés bajó un 0,98% y el FTSE 100 británico bajó un 0,22%.
Los inversores están observando una situación negativa en los mercados asiáticos, que están disminuyendo en las operaciones de hoy debido a las estadísticas de China. Los operadores están preocupados por los datos negativos del PIB de la República Popular China para el tercer trimestre y los informes de producción industrial y ventas minoristas del mes pasado. Esto se debe principalmente a los problemas energéticos y de suministro, así como a la incertidumbre en el mercado inmobiliario.
El continuo aumento del precio de la energía, que inevitablemente está provocando una crisis energética en Europa y en otros lugares, es otro motivo de preocupación.
Esta semana se dará a conocer los estados financieros de las empresas más grandes de la región europea. Los operadores esperan que datos positivos de los informes tengan un efecto beneficioso en los mercados.
El valor de los valores de LVMH y Kering cayó un 3% como resultado del anuncio de la República Popular China de su intención de aumentar el impuesto sobre la renta. El precio de las acciones de Philips también cayó un 0,6% como resultado del empeoramiento de las perspectivas de la compañía sobre las ganancias anuales. Esto fue el resultado de una serie de grandes retiradas de productos, así como una escasez global de componentes, lo que llevó a cifras negativas de la compañía para el tercer trimestre de este año.
