En la rueda de prensa posterior a la reunión de la Fed de la semana pasada, J. Powell dejó claro a los mercados que el regulador no tiene planes de empezar a subir las tasas de interés en un futuro próximo, lo que ya ha presionado los rendimientos del Tesoro y al dólar. Pero lo importante en este contexto es que su opinión cuenta con el pleno apoyo de los miembros del banco central, por lo que no cabe esperar divergencias entre el gobernador de la Fed y los miembros del Comité de Mercado Abierto (FOMC), que deciden colectivamente las tasas.
También es importante la opinión de, por ejemplo, C. Evans, J. Bullard y R. Clarida, que hablaron el lunes, de que la alta inflación es un fenómeno temporal, no es lo suficientemente alta como para tomar medidas radicales y que la Fed está "lejos de considerar" una subida de las tasas de interés.
Esto hace que se plantee la siguiente pregunta: ¿por qué el regulador estadounidense ignora la elevada tasa de inflación del 5,4% para EE.UU. en el intervalo de 13 años?
A decir verdad, la inflación real o de consumo es mucho más alta. En nuestra opinión, tiene que ver con un deseo obsesivo de la clase dirigente de Estados Unidos de sentarse en dos sillas: por un lado, mantener atractivas las inversiones en la economía estadounidense, ya que los índices bursátiles siguen "hinchándose" desmesuradamente, y por otro lado, no estimular una venta en el mercado de bonos del Estado, cuyos precios a la baja se convierten en rendimientos más altos y, por tanto, en mayores pagos de la deuda por parte del Gobierno a sus prestatarios. Por otra parte, hay que señalar que la deuda nacional es ya más de dos veces el presupuesto anual del país. Prácticamente en un lecho de problemas, la Fed intenta resolver dos problemas opuestos evitando los problemas sociales generalizados dentro del país y el impago del círculo externo.
Con esta política, que probablemente dominará al banco central durante algún tiempo, esperamos que se mantengan las tendencias actuales del mercado, con el dólar en el índice ICE a 94,00, los índices bursátiles continuando con nuevos máximos y los precios del crudo y los metales preciosos consolidándose en torno a los niveles actuales. Esto sólo puede terminar con una implosión bursátil y las secuelas de 1929, o la inevitabilidad de la decisión de empezar a subir las tasas de interés.
Pronóstico del día:
El par USDJPY ha salido del rango 113,20-114,40 en el que se ha consolidado desde mediados de octubre. Una caída por debajo de 113,20 y una consolidación por debajo de ese nivel podría llevar a nuevas caídas hacia 112,00.
El precio del oro al contado ha hecho una pausa y está por debajo de 1830,00 y se puede corregir hasta 1810,00 antes de un nuevo repunte hasta este nivel y luego hasta 1854,00.
