La tendencia general de la semana anterior es el endurecimiento de la posición de la Fed, que señaló su intención de considerar el tema de la primera subida de tasas en marzo, y no en junio, como se suponía hace poco tiempo. En consecuencia, los mercados reaccionaron: el índice S&P500 ha caído un poco más del 3% desde principios de año, mientras que el rendimiento de los bonos del Tesoro sigue creciendo.
El impulso alcista cesó levemente el viernes ya que varios datos sobre la producción industrial, los precios de exportación e importación y las ventas minoristas resultaron ser peores de lo esperado en todos los frentes. Estos datos negativos debilitaron levemente el impulso alcista del dólar estadounidense, mientras que el mercado de valores subió de inmediato.
La posición general sobre el dólar estadounidense ha cambiado un poco. La falta de dirección se observa por sexta semana consecutiva, y el crecimiento de 334 millones a 20.034 millones es demasiado insignificante para contar con la formación de una tendencia estable.
Se supone que la moneda estadounidense estará bajo presión el lunes, ya que los miembros de la Fed deberían evaluar la probabilidad de una desaceleración en el impulso inflacionario. Esto calmará ligeramente a los alcistas y aumentará la demanda de riesgo.
EUR/USD
No hubo informes macroeconómicos importantes de la UE la semana pasada. La atención se centró en los comentarios del BCE sobre la situación actual, pero tampoco aclararon mucho. El jueves, el vicepresidente del BCE, Guindos, insinuó que la inflación podría ser más estable de lo que se pensaba, pero al día siguiente, C. Lagarde reiteró su posición de que los altos precios de la energía están en el corazón de la inflación, y cuando estos precios bajen, la inflación regresará automáticamente al objetivo.
La diferencia de enfoques entre la Fed y el BCE continúa. La Fed insinúa cada vez más la primera subida de tasas en marzo, mientras que el BCE en general se niega a considerar una subida en un futuro próximo. El tipo de cambio del euro se centrará en esta diferencia, por lo que cualquier crecimiento se considera una corrección.
Una pequeña posición corta en el euro se convirtió en una pequeña posición larga durante la semana del informe (+853 millones). El posicionamiento especulativo confirma la tendencia alcista, que ya ha llevado a la ruptura del nivel de resistencia de 1,14. Hay buenas razones para creer que el crecimiento continuará, ya que el precio de liquidación todavía está dirigido hacia arriba.
El euro subió por encima del borde superior del canal bajista, pero no hubo razones fundamentales para un cambio de tendencia alcista. Seguimos considerando el crecimiento como correctivo. El impulso aún no ha terminado, por lo que se puede esperar un intento de subir aún más. Las resistencias más cercanas son 1,1520 y 1,1630.
GBP/USD
Hoy, NIESR presentará una estimación del crecimiento del PIB en diciembre. El martes se publicará un informe sobre el mercado laboral y el miércoles se conocerá el informe de inflación de Reino Unido de diciembre, por lo que es un día clave para la libra. Se espera que el índice general de precios al consumidor se mantenga en un nivel de poco más del 5% a/a. El índice subyacente ronda el 4%, pero también se puede señalar que la inflación resultó ser superior a la esperada en cinco casos en los últimos siete meses. Si se confirman las previsiones, esto tendrá un efecto alcista en las cotizaciones.
En general, el crecimiento de la libra estuvo respaldado por un aumento en la demanda de riesgo, así como por un factor inesperado: una mayor presión sobre el primer ministro Johnson para que renuncie. Johnson, partidario de las estrictas medidas de cuarentena, resultó no ser un gran fanático de observar estas medidas. Se espera que su posible renuncia sirva como detonante para levantar las restricciones, lo que puede tener un impacto positivo en el crecimiento de la demanda de los consumidores.
La posición corta neta sobre la libra cayó en 827 millones hasta -2.485 millones. Los bajistas todavía tienen la ventaja, pero ha habido intentos constantes durante las últimas dos semanas para reducir la posición corta, lo que está respaldado por un aumento en la demanda de riesgo.
Como se supuso anteriormente, la libra probó con éxito el borde del canal bajista y subió, acercándose al objetivo de 1,3820/30. Desde un punto de vista técnico, una consolidación por encima de este nivel puede significar un cambio de tendencia, pero el panorama fundamental sigue siendo inestable.
