El debate sobre dónde invertir en 2022, ya sea en bitcoin o en oro, continúa escalando. El equipo de materias primas de Goldman Sachs sugiere que el metal precioso tendrá una mayor ventaja.
Cabe señalar que los precios del oro se mantienen en torno a los $1,800 la onza:
Mientras tanto, Bitcoin sufrió pérdidas significativas, cayendo alrededor de un 20% en enero, marcando el peor comienzo de año desde su creación. Actualmente, la primera criptomoneda del mundo cotiza por debajo del 50% de sus máximos históricos en noviembre.
Los analistas de materias primas de Goldman Sachs dijeron en un informe publicado la semana pasada que la desaceleración del crecimiento económico este año seguirá ejerciendo presión sobre las principales criptomonedas.
Según los analistas de este banco de inversión, Bitcoin es una cobertura contra el riesgo de inflación. Sin embargo, los economistas creen que una posición larga en oro sería más eficaz en el entorno macroeconómico actual para los inversores que buscan una forma de proteger sus carteras frente a los riesgos de la desaceleración del crecimiento y la caída de los precios.
También señalaron que, aunque Bitcoin mostró un rendimiento nominal récord el año pasado, el rendimiento del mercado ajustado al riesgo fue más bajo que el mercado en su conjunto.
Esto se debe a la falta de uso de criptomonedas fuera del almacén de valor digital, lo que indica que aún es demasiado pronto para que las criptomonedas compitan con el oro o el dólar estadounidense como inversión segura.
Sin embargo, Bitcoin no ha sufrido solo, ya que los inversores comienzan a reducir los riesgos en sus carteras.
El sector de la tecnología ha sufrido notablemente desde el comienzo del año: el Nasdaq ha caído más del 11%.
El jueves fue especialmente devastador para Facebook, ya que cayó más del 20%, perdiendo más de $200 mil millones en una sesión. La venta masiva se desencadenó después de que la compañía informara una disminución en la cantidad de usuarios activos por día por primera vez en 18 años.
