La moneda estadounidense navega una vez más entre datos macroeconómicos negativos de EE. UU. y tensiones geopolíticas. Esta vez, el USD lucha por beneficiarse de la situación actual. Debido a una serie de factores desfavorables, mantener su posición dominante es una tarea cada vez más difícil para el dólar estadounidense.
El USD subió frente al EUR a última hora del jueves 24 de marzo, después de que el Departamento de Trabajo de EE. UU. publicara los últimos datos de solicitudes de desempleo. El número de estadounidenses que presentan nuevas solicitudes de beneficios por desempleo ha caído al punto más bajo en 53 años: 187.000. Las solicitudes iniciales se han acercado a los niveles previos a la pandemia durante las últimas 4 semanas: antes de COVID-19, el número rondaba los 220.000.
Esta situación le ha dado cierto impulso a la moneda estadounidense, ayudándola a superar la caída de hoy. El USD se desplomó temprano el viernes frente a sus pares en el período previo a la publicación de datos de hoy. Los datos de Sentimiento del Consumidor de la Universidad de Michigan se publicarán hoy; se espera que disminuyan a 59,7 puntos en comparación con los 62,8 puntos de febrero. El índice se utiliza para evaluar las actitudes de los consumidores hacia el estado de la economía estadounidense.
Aunque la moneda estadounidense está fuertemente influenciada por las estadísticas macroeconómicas y la situación geopolítica, está lejos de ser impotente. Las expectativas de un mayor endurecimiento monetario por parte de la Fed respaldan al dólar estadounidense. La mayoría de los analistas prevén que el regulador suba la tasa al 0,75%-1% en mayo. Anteriormente, el presidente de la Fed, Jerome Powell, señaló que el banco central de EE. UU. adoptaría una política más agresiva y aumentaría la tasa clave en más de 25 puntos básicos si fuera necesario.
Los sólidos datos del mercado laboral de EE. UU. se han convertido en un factor positivo para el USD, lo que le da margen de maniobra a la Reserva Federal. La Fed puede endurecer su política sin el riesgo de desencadenar una recesión. Los datos macroeconómicos actuales también alientan estos cambios de política. El mercado laboral en expansión está acelerando la espiral inflacionaria, manteniendo los precios actuales de la energía, así como los precios de ciertos bienes.
En este punto, el euro se ve eclipsado por la geopolítica. Aunque los inversores no lo ignoran, prefieren los activos de riesgo. El EUR está bajo la presión de las crecientes tensiones geopolíticas. Si el BCE mantiene su tono moderado, el EUR/USD podría caer aún más, dicen los analistas.
El par avanzará si la situación geopolítica mejora. Actualmente, los mercados son cautelosamente optimistas. El EUR/USD cotizaba a 1,1026 a primera hora del viernes, tratando de superar este nivel. Sin embargo, la tendencia bajista podría retomarse en las próximas semanas debido a la incertidumbre sobre la política monetaria.
A diferencia de la Reserva Federal, el Banco Central Europeo mantiene su posición moderada. El regulador aún podría reconsiderar su postura y seguir a su homólogo estadounidense en su próxima reunión, prevista para el 14 de abril.