El patrón de onda del gráfico de 4 horas para el instrumento Euro/Dólar sigue siendo convincente. La supuesta onda 4 ha tomado una forma de cinco ondas y ha resultado ser completamente diferente de la onda 2. Sin embargo, esta onda se reconoce ahora como terminada, y el patrón de la onda no requiere ningún cambio. En este sentido, el instrumento comenzó a construir la supuesta onda 5 en E. Si esta suposición es correcta, la caída de las cotizaciones del euro puede continuar durante uno o dos meses más. Por el momento, toda la estructura de ondas del sector bajista de la tendencia parece casi completa, pero es probable que la onda 5 en E también adopte una forma de cinco ondas. Si es así, por el momento sólo se ha completado la primera onda de la onda 5 en E. Así pues, el instrumento todavía tiene un potencial bajista bastante fuerte. El primer objetivo está cerca del nivel de 1,0721, que equivale al 200,0% de Fibonacci. Mientras tanto, gran parte del instrumento dependerá ahora no sólo de la geopolítica, sino también de los precios del gas y del petróleo y de una futura ruptura de las relaciones entre Rusia y la Unión Europea.
La primera vuelta de las elecciones presidenciales en la patria de los mosqueteros de Napoleón tendrá lugar el 10 de abril.
El viernes, el instrumento Euro/Dólar bajó sólo unos pocos pips, lo que no tuvo efecto en el patrón de onda actual. El fondo de las noticias del viernes no fue débil, sino que estuvo ausente. Al menos si hablamos de economía. Todo el espacio informativo se vio inundado de noticias sobre "Ucrania", "Rusia". Ursula von der Leyen fue a Kiev para ver por sí misma la destrucción de los alrededores tras la desocupación de las tropas rusas. Inmediatamente después de esta reunión, en la Unión Europea se habló de un nuevo y sexto paquete de sanciones contra Moscú. Al mismo tiempo, el sentimiento "antirruso" comenzó a crecer dentro de la propia UE. No es ningún secreto que el líder húngaro Viktor Orban apoya a Rusia y su partido ha ganado recientemente las elecciones en ese país, lo que indica que todo el pueblo húngaro también apoya a Rusia. Por ello, Polonia decidió interrumpir toda cooperación con Hungría hasta que "Orban visite a un oftalmólogo", según Jaroslaw Kaczynski, jefe del partido Ley y Justicia. Por cierto, la posición húngara no influye en la posición común de la Unión Europea.
Sin embargo, mañana puede producirse un acontecimiento muy notable en Francia, donde tendrá lugar la primera ronda de las elecciones presidenciales. El actual presidente Macron apoya a Ucrania, pero no ha renunciado a intentar llegar a un acuerdo personal con el presidente ruso Vladimir Putin recientemente. En este contexto, sus valoraciones personales han caído de forma muy pronunciada justo antes de las elecciones. La segunda candidata a la presidencia de Francia, Marine Le Pen, ha declarado abiertamente en repetidas ocasiones que ve con buenos ojos la cooperación con Rusia y, en general, apoya a Putin, aunque ha condenado públicamente la "masacre de Bucha". El tercer candidato presidencial, Eric Zemmour, también ha sido vinculado a Rusia y ha puesto en duda la veracidad de los vídeos presentados desde los suburbios de Kiev. Las encuestas de opinión muestran a Macron actualmente por delante de Le Pen con un 6% y se espera que pasen a la segunda ronda de las elecciones. Si Macron gana, la posición de Francia no cambiará. Si Le Pen gana, Francia puede empezar a cambiar su rumbo hacia el Kremlin.
Conclusiones generales.
Basándome en el análisis, sigo afirmando que la onda E sigue creciendo. Si es así, sigue siendo un buen momento para vender la divisa europea con los objetivos situados cerca de el nivel 1,0721, que corresponde al valor de 200,0% de Fibonacci para cada señal bajista del MACD. El patrón de onda actual sugiere la construcción de la onda 5 en E, que también podría resultar bastante extendida. En los próximos días puede comenzar a construirse una onda correctiva, tras la cual espero una nueva caída del instrumento.En una escala mayor, podemos ver que la construcción de la supuesta onda D se ha completado y el instrumento ha actualizado su mínimo. Así pues, ahora se está construyendo la quinta onda del tramo bajista no pulsado de la tendencia, que puede llegar a ser tan extensa como la onda C. Si esta suposición es correcta, la moneda europea seguirá bajando.