Durante mucho tiempo, la moneda europea ha estado cayendo, incapaz de seguir el ritmo del dólar en alza. Sin embargo, ahora la situación ha cambiado drásticamente. El euro activó el "modo cohete" y se elevó rápidamente a nuevos picos de precios.
El fuerte crecimiento del euro se vio favorecido por una notable mejora en la confianza del mercado. Esto se vio facilitado por un mayor apetito por el riesgo, en cuya ola subió la moneda única. Los datos positivos sobre la economía del eurobloque se convirtieron en una especie de "combustible" para el EUR. Según Eurostat, en el primer trimestre el PIB de la eurozona creció un 5,1% interanual, superando la previsión del 5%. Durante el período del informe, la economía de 19 países de la eurozona aumentó un 0,3% en comparación con el indicador anterior. Al mismo tiempo, la tasa de empleo sumó 0,5% en el primer trimestre, manteniéndose dentro de las expectativas del mercado.
En este contexto, el par EUR/USD ganó confianza y subió a nuevos picos. El par subió un 0,5% el martes 17 de mayo y luego continuó su movimiento alcista. El par EUR/USD cotizaba en el rango 1,0529-1,0530 el miércoles 18 de mayo por la mañana, tratando de subir más alto.
El sentimiento de riesgo prevalece actualmente en los mercados, como lo demuestra el crecimiento de los índices bursátiles, principalmente en Europa y Estados Unidos. Tales sentimientos afectan negativamente a la moneda estadounidense y contribuyen al auge de la europea. En una ola de sentimiento de riesgo, el dólar se recuperó desde un máximo de 20 años. En este contexto, el par EUR/USD recibió un poderoso impulso de crecimiento, lo que lo ayudó a superar una importante barrera psicológica de 1,0500.
Sin embargo, el dólar no se rinde, aprovechando cierto debilitamiento del euro. Los indicadores macroeconómicos no son de poca importancia para la recuperación del dólar. Según datos de abril, el volumen de ventas minoristas en Estados Unidos aumentó un 0,9%. Cabe señalar que los informes actuales resultaron ser un poco más débiles (se esperaba un aumento del 1%). Al mismo tiempo, las ventas de abril (excluyendo automóviles y gasolina) aumentaron un 0,6%.
Sin embargo, los indicadores fuertes tuvieron poco efecto en la dinámica del dólar, según creen los expertos. Según ellos, los mercados han descontado totalmente dos subidas de tasas de la Reserva Federal (de 50 pb en cada reunión). En tal situación, es difícil para los alcistas del USD lograr el resultado deseado.
Los inversores están centrados, además de la decisión de la Fed, en las perspectivas de endurecimiento de la política monetaria del Banco Central Europeo. Según Reuters, en un futuro cercano, el banco central subirá la tasa de interés en 25 pb y abandonará las tasas negativas para fines de septiembre de 2022. "En la situación actual, existe una alta probabilidad de un cambio de tasa de un cuarto de punto en las reuniones de julio y septiembre del BCE", subraya Reuters. En este contexto, el euro intenta mantener las posiciones conquistadas. Según los analistas, esto es posible mientras se mantenga el sentimiento positivo del mercado y el apetito por el riesgo.
