La moneda estadounidense retrocedió temporalmente, pero luego recuperó el tiempo perdido, demostrando una dinámica multidireccional al final de la semana. Algunas fluctuaciones en el USD ocurrieron después de la publicación de las actas del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC).
Los intentos del dólar por mirar más allá del horizonte, más allá de lo que está sucediendo, contribuyeron a su hundimiento. A futuro, el dólar recuperó sus pérdidas, ya que fueron de corto plazo. Al mismo tiempo, la moneda europea tampoco tuvo una ventaja inicial. Como resultado, el par EUR/USD estaba en el limbo. El miércoles 25 de mayo, la moneda única subió a un máximo de 1,0748. Al mismo tiempo, los expertos consideran inestable el impulso alcista del EUR. Anteriormente, los analistas dijeron que el euro estaba sobrecomprado, lo que perjudicó a este último.
Como resultado, la moneda europea se disparó brevemente y luego volvió a una tendencia moderadamente bajista. Posteriormente, el euro se asentó y volvió al rango de 1,0670-1,0750. En la mañana del jueves 26 de mayo, el par EUR/USD cotizaba cerca de los 1,0680, casi sin traspasar estos límites.
Según los estrategas de divisas de Commerzbank, es poco probable que la moneda única siga creciendo, aunque ya se ha superado el mínimo en el nivel de 1,0400. El euro, a diferencia del dólar, no dispone de recursos suficientes para una recuperación sistemática. Incluso los sentimientos agresivos del Banco Central Europeo no corrigieron la situación.
Commerzbank no descarta que el rumbo actual del BCE destinado a endurecer la política monetaria pueda cambiar: "Hay incertidumbres económicas y riesgos en la eurozona que podrían obligar al BCE a actuar con más cautela, por ejemplo, en caso de una crisis energética". En tal situación, el euro no podrá crecer más, especialmente después de que el mercado haya ajustado significativamente sus expectativas de las tasas".
En el tema del aumento de las tasas de interés, el dólar sigue siendo el líder. A pesar de la última reunión del FOMC y de la posición claramente expresada por el banco central sobre cuestiones apremiantes, el USD fluctuó cerca de un mínimo mensual. Los expertos explican tal dinámica del dólar por la coincidencia de las expectativas del mercado con las acciones de la Fed. En la coyuntura actual, el dólar sigue siendo una moneda refugio, beneficiándose de una mejora en el apetito por el riesgo.
La moneda estadounidense se vio respaldada por los resultados de la última reunión del FOMC. Los asistentes a la reunión de mayo fueron unánimes en el tema de elevar la tasa de referencia en 50 puntos básicos (pb) en las próximas reuniones del banco central (programadas en junio y julio). Representantes del FOMC publicaron las actas de la reunión de la Fed, según las cuales el banco central elevó las tasas en los 50 pb esperados (hasta 1,0%) y anunció el fortalecimiento del programa de ajuste cuantitativo, que comienza en junio.
Todos los participantes de la reunión coincidieron en la necesidad de aumentar la tasa de interés en 50 pbs, por considerarlo adecuado. Muchos de ellos llamaron la atención sobre el enorme potencial de la economía estadounidense, a pesar de la lucha contra la inflación altísima. Representantes del FOMC destacaron la importancia de combatir el desempleo, destacando la alta demanda en el mercado laboral de Estados Unidos.
Los funcionarios apoyaron los planes actuales para reducir el saldo de la Fed. Los problemas de inflación en el país fueron honrados con un conversatorio aparte. Los representantes del banco central están listos para monitorear cuidadosamente la situación para evitar un aumento de los riesgos inflacionarios, que se dirigen hacia arriba.
La situación actual ejerce presión sobre la moneda estadounidense. Por un lado, el dólar se tambalea sobre el abismo y, por el otro, recibe un impulso para seguir creciendo. Al mismo tiempo, los intentos del dólar por mirar más allá del horizonte de eventos son improductivos y el equilibrio relativo en el par EUR/USD nos permite contar con una tendencia positiva.
