La creciente amenaza de inflación hizo que el Banco Central Europeo sorprendiera a los mercados elevando las tasas de interés en 50 puntos básicos, dando al euro un nuevo impulso frente al dólar estadounidense y, a su vez, elevando los precios del oro por encima de los $1,700 la onza.
Junto con las crecientes presiones de los precios, la presidenta del BCE, Christine Lagarde, también señaló los crecientes riesgos económicos. Pero al mismo tiempo, agregó que según el banco central: la economía europea no caerá en recesión.
Incluso cuando la economía europea enfrenta crecientes riesgos a la baja, el BCE ve la inflación como la mayor amenaza en el futuro.
Si bien el BCE espera continuar aumentando las tasas de interés durante el resto del año, los mercados ven pocas señales de endurecimiento.
Lagarde dijo que el banco central no haría ninguna predicción de aumento de tasas y agregó que no sabía dónde estaría la tasa neutral.
Junto con el aumento de las tasas de interés, el BCE también aprobó un nuevo instrumento de política: el Instrumento para la Protección de la Transmisión (TPI).
Aunque el TPI se lanzó para mitigar los riesgos de fragmentación en la eurozona, los mercados no han recibido mucha información sobre su implementación.
Según algunos analistas de mercado, la política agresiva del BCE debería ayudar a mejorar la confianza en el mercado del oro, ya que las ganancias del dólar estadounidense pueden ser limitadas.
El dólar estadounidense está en un repunte imparable, alcanzando recientemente un máximo de 20 años y acercándose a la paridad con el euro. Los analistas dicen que la caída del dólar estadounidense se debe en parte a una gran diferencia en la política monetaria entre la Reserva Federal y el BCE.
Esta es la primera vez que el BCE sube las tasas de interés en más de una década. Al mismo tiempo, la Reserva Federal ya subió las tasas de interés tres veces este año, elevando la tasa de los fondos federales a un nivel objetivo de 1,50% a 1,75%.
Mirando al futuro, algunos analistas ven un margen limitado para el euro, ya que la diferencia de tipos de interés sigue siendo especialmente amplia.
Según los analistas de divisas de TD Securities: en un futuro próximo, el euro enfrentará una resistencia entre 1,02807 y 1,03485 frente al dólar estadounidense. Dado que se espera que el euro sea limitado, los precios del oro pueden seguir cayendo.
Se espera que la Reserva Federal aumente las tasas de interés en otros 75 puntos básicos a finales de este mes.