El trasfondo fundamental para el par EUR/USD sigue siendo ambiguo. Por un lado, el dólar está bajo presión ante la creciente confianza en la ralentización de la subida de tipos de la Fed hasta los 25 puntos. Por otro lado, los operadores necesitan impulso de información adicional para el movimiento alcista. El par se consolidó dentro de la octava cifra (por primera vez desde abril pasado), pero para conquistar el noveno nivel de precios, sin mencionar la décima cifra, necesitan un poderoso disparador de información.
Antirrécords chinos
Los expertos depositaron ciertas esperanzas en China, que hoy publicó datos clave sobre su crecimiento económico. Sin embargo, estas esperanzas no estaban justificadas. Los datos resultaron ser negativos, pero en su mayor parte salieron en zona verde. Ni el dólar ni el euro fueron los beneficiarios del comunicado de hoy.
En términos de cifras, la situación es la siguiente. El PIB de China creció un 3,0 % el año pasado, frente al 8,4 % de 2021. Si excluimos el crecimiento del 2,2 % tras el primer golpe de la crisis del coronavirus en 2020, este es el peor desempeño desde 1976. Claramente, este resultado refleja los efectos de la política de "tolerancia cero" sobre COVID, que Beijing abandonó solo a fines del año pasado. Un giro brusco de 180 grados sugiere que en 2023 habrá condiciones para el crecimiento económico en China. Además, según The Wall Street Journal, las autoridades chinas han aliviado significativamente la presión sobre las empresas de tecnología, han relajado la estricta regulación de bienes raíces y recientemente levantaron la prohibición de importar carbón de Australia (que estuvo en vigor durante más de dos años). Sin embargo, queda otra pregunta con respecto a la demanda mundial general de productos chinos, dada la desaceleración económica mundial y la amenaza de recesión en las economías más grandes del mundo.
Además, hoy se publicó otra señal alarmante: se supo que la población de la República Popular China disminuyó el año pasado por primera vez en más de 60 años. Según varios analistas, se trata de un cambio histórico que en el futuro tendrá consecuencias a largo plazo tanto para la economía china como para la mundial. Según los datos, la población china disminuyó en 850.000 personas el año pasado a 1.410 millones.
La otra cara de la moneda
Sin embargo, a pesar de los antirrécords establecidos, el dólar no pudo beneficiarse de la situación, incluso a la par con el euro. Varios factores actuaron como contrapeso.
Primero, casi todos los componentes de la publicación de hoy salieron en la zona verde. El PIB del cuarto trimestre de China superó las previsiones a pesar del crecimiento al ritmo más lento desde la década de 1970, con la economía de China expandiéndose un 2,9 % (frenándose al crecimiento del 3,9 % en el tercer trimestre), mientras que la previsión general era del 1,8 %. Como se mencionó anteriormente, en 2022, la economía china creció un 3,0 %, mientras que la previsión era del 2,7 %. Otros indicadores también están en verde: por ejemplo, las ventas minoristas en diciembre cayeron un 1,8 %, mientras que los expertos fueron más pesimistas en sus estimaciones, esperando una caída del 9,5 %. Por su parte, el volumen de la producción industrial creció un 1,3 % (en términos anuales), con una débil previsión de crecimiento del 0,5 %. La tasa oficial de desempleo cayó al 5,5 % (la previsión era del 5,8 %).
El segundo factor de apoyo que suavizó un poco las emociones negativas en el mercado a partir de la publicación de hoy fue el hecho de que Beijing abandonó la política francamente destructiva de cero COVID.
Por lo tanto, las señales contradictorias de China no pudieron inclinar la balanza, ni en la dirección de los compradores ni en la dirección de los vendedores de EUR/USD.
Además, los representantes del BCE brindan cierto apoyo al euro y expresaron comentarios agresivos. En particular, el economista jefe del Banco Central Europeo, Philip Lane, dijo en una entrevista con el Financial Times que "las tasas de interés deberían ser mucho más altas de lo que son ahora". Mensajes similares anteriores fueron expresados por otros representantes del regulador europeo, en particular Martins Kazaks, Isabel Schnabel, Robert Holzmann, Olli Rehn y Francois Villeroy de Galhau.
Conclusiones
El par se mantiene dentro de la octava cifra, en el contexto de la debilidad general del dólar y la probabilidad del 90 % de la implementación del escenario de 25 puntos en la reunión de febrero de la Fed. Los comentarios agresivos del BCE solo alimentan el interés en comprar EUR/USD, pero no permiten que los alcistas del par organicen un contraataque a gran escala.
En mi opinión, las posiciones cortas en el par son demasiado arriesgadas y fundamentalmente irrazonables. Mientras que es recomendable considerar largos solo después de superar el nivel de resistencia de 1,0860, que corresponde a la línea superior del indicador de Bandas de Bollinger en el marco de tiempo D1. Es probable que la turbulencia de precios (que puede no ser a favor del dólar) sea provocada por representantes de la Fed, muchos de los cuales expresarán su posición en la segunda mitad de la semana. El mercado espera discursos de Lorie Logan, Susan Collins, Lael Brainard, Patrick Harker, Christopher Waller y John Williams. Quizás cambiarán el equilibrio de poder hacia los compradores de EUR/USD. Sin embargo, en la situación actual, bastante inestable, es mejor adoptar una actitud de esperar y ver.
