La libra recuperó sus pérdidas y volvió a los máximos de la semana pasada a pesar de que ayer el calendario macroeconómico estuvo vacío y no hubo declaraciones del Banco de Inglaterra. Esto es gracias al Banco Central Europeo, más precisamente a sus representantes y sus declaraciones, que hicieron subir al euro y, a su vez, arrastraron a la libra con él. Lo más interesante fueron las palabras de Isabelle Schnabel, quien dijo abiertamente que todos deberían prepararse para un largo período de tasas de interés relativamente altas. Se refirió repetidamente a la evolución de las tasas de interés antes de 2008, argumentando que el entorno actual es más difícil, por lo que la tasa de interés promedio debería ser más alta que entonces. Hasta la crisis de 2008, los tipos de interés en Europa oscilaban entre el 2,00% y el 4,75% con un nivel medio en torno al 3,00%. De ello se puede concluir que la inminente subida de tipos no será la última, y que por el momento no se plantea una rebaja. Schnabel también aseguró que el BCE tiene suficientes recursos para evitar que la crisis bancaria se propague.
En definitiva, el euro subió y arrastró con él a la libra, pero sólo esta última pudo volver a los máximos locales. En cuanto a hoy, dado que el calendario macroeconómico es una vez más, es probable que el euro suba, tratando de volver a los máximos recientes. Eso, a su vez, empujará la libra ligeramente hacia arriba.
El EUR/USD subió por encima de 1,0800, lo que indica un aumento en las posiciones largas. Si los compradores logran mantener la cotización en este nivel, existe una alta probabilidad de que el par obtenga más ganancias.
El GBP/USD ha estado subiendo desde la apertura de operaciones esta semana. Como tal, ha recuperado sus pérdidas recientes y mantenerse por encima de 1,2350 resultará en un aumento adicional en la dirección del máximo local en el mediano plazo.