El par EUR/USD se encontró en una zona turbulenta tras la publicación de datos macro importantes. Los bajistas intentaron llevar el precio por debajo del objetivo de 1,0960 (la línea media del indicador de Bandas de Bollinger en el gráfico diario), mientras que los alcistas, a su vez, intentaron acercarse al nivel de resistencia de 1,1070 (la línea superior de Bandas de Bollinger en el mismo gráfico). Bajistas y alcistas tiraron alternativamente de la cuerda hacia su lado, pero la situación sigue siendo la misma: el par mostró una mayor volatilidad, pero en realidad se mantuvo sin cambios, operando dentro del rango de 1,0960-1,1070. Esta situación se explica por el contexto fundamental contradictorio que se ha desarrollado para el par. Los datos macro clave que se publicaron el jueves y el viernes dejaron más preguntas que respuestas. El complejo rompecabezas se complicó aún más por otro factor inesperado: el posible colapso de otro banco estadounidense. Sin embargo, discutamos todo en orden.
PIB de EE. UU. e índice básico PCE
El dólar reaccionó positivamente al informe del PIB de EE. UU., a pesar de que estaba en "rojo". El volumen del PIB de EE. UU. aumentó solo un 1,1% en el primer trimestre, mientras que la mayoría de los expertos esperaban ver una tasa de crecimiento del 2%. Sin embargo, los componentes inflacionarios del informe estaban del lado del billete verde. El deflactor del PIB básico en el primer trimestre estuvo en "verde", aumentando un 4,9% interanual, con un crecimiento previsto del 4,7% interanual. El gasto del consumidor aumentó un 3,7% (la tasa de crecimiento más alta desde el segundo trimestre de 2021).
Sin embargo, después de este informe, las posibilidades de un aumento de tasas en mayo aumentaron al 80%. Tras el informe del viernes, la probabilidad de implementar este escenario se estima ahora en casi el 90%. Estamos hablando del índice de precios del gasto personal en consumo (PCE) básico en los EE. UU. Como saben, este indicador de inflación es monitoreado de cerca por la Fed, por lo que el mercado presta mucha atención a él. De un año a otro, el indicador disminuyó al 4,6% con una disminución pronosticada al 4,5%. El "tinte verde" de este informe respaldó al dólar, aunque, en general, el informe reflejó una disminución en el indicador. Desde septiembre hasta diciembre del año pasado, el índice disminuyó constantemente, del 5,2% al 4,6%. Luego, en enero y febrero, el indicador se mantuvo en el 4,7% y, en marzo, volvió al nivel de diciembre del 4,6%.
En general, los informes mencionados sugieren que la Fed decidirá otro paso para endurecer la política monetaria. Recordemos que la previsión mediana actualizada en marzo también suponía otro aumento de 25 puntos para fin de año. Sin embargo, estos informes no es probable que refuercen el sentimiento halcón del banco central, especialmente ante los problemas con First Republic Bank. Según Reuters, los reguladores de EE. UU. actualmente están negociando para salvar al banco, que está al borde de la quiebra. Según información privilegiada, las negociaciones gubernamentales ahora se centran en prepararse para transferir First Republic bajo el control de la FDIC (Corporación Federal de Seguros de Depósitos). Mientras tanto, las acciones de First Republic colapsaron un 30% (a $4,31) el viernes, y desde marzo, con el comienzo de la crisis bancaria en los EE. UU., las acciones del banco han perdido el 95% de su valor.
Tal contexto informativo no contribuye a fortalecer el sentimiento agresivo de la Fed, por lo que el dólar no pudo mantener las posiciones que había ocupado y se debilitó en todo el mercado al final de la semana de operaciones.
PIB de la zona euro e inflación alemana
A pesar del debilitamiento general del billete verde, los alcistas del EUR/USD no pudieron aprovechar la situación. El par se mantuvo dentro del rango de precios mencionado anteriormente, terminando la semana de operaciones en la marca de 1,1018. El hecho es que también se publicaron datos macro importantes en Europa, que también dejaron muchas preguntas. En el primer trimestre de 2023, el PIB de la zona euro creció un 0,1% trimestral, que fue inferior al crecimiento esperado del 0,2%. De un año a otro, el indicador aumentó al 1,3% con un pronóstico de crecimiento al 1,4%. El mayor crecimiento en comparación con el trimestre anterior se registró en Portugal, España, Italia y Letonia. Se registró una tendencia a la baja en Irlanda (-2,7% trimestral) y Austria (-0,3%).
Por un lado, el indicador terminó en "rojo", sin alcanzar el nivel pronosticado. Por otro lado, la zona euro evitó efectivamente una recesión, comenzando el año con un crecimiento del PIB. Además, la estructura del informe indica que el crecimiento de los precios al consumidor se aceleró en Francia y España.
Hablando de inflación, otro informe importante influyó en la dinámica del par EUR/USD. El índice de precios al consumidor en Alemania, en términos anuales, disminuyó en abril al 7,2%, con una disminución pronosticada al 7,3%. En términos mensuales, los precios al consumidor aumentaron un 0,4%, mientras que los expertos esperaban un crecimiento más significativo (hasta el 0,8%). El Índice Armonizado de Precios al Consumidor (HICP, por sus siglas en inglés), que el Banco Central Europeo prefiere utilizar para medir la inflación, tampoco coincidió con las previsiones. En abril, alcanzó el 7,6%, mientras que la mayoría de los expertos pronosticaban un crecimiento al 7,8%.
Aquí nuevamente, un conjunto de contradicciones. Por un lado, el clima invernal suave y los estímulos fiscales ayudaron a la zona euro a evitar una recesión. Por otro lado, el crecimiento económico europeo sigue siendo débil y el ritmo de disminución de la inflación en Alemania resultó ser más fuerte en comparación con las previsiones de la mayoría de los expertos (aunque el IPC sigue siendo un nivel inaceptablemente alto).
Conclusiones
En mi opinión, los datos macro clave publicados la semana pasada no cambiaron la situación de manera drástica. El débil crecimiento económico de EE. UU. fue "compensado" por un aumento significativo en el deflactor del PIB. Esta combinación sugiere que la Reserva Federal probablemente aumentará la tasa en 25 puntos básicos pero no "esgrimirá su espada" endureciendo su retórica (además, no debemos olvidar la situación con el First Republic Bank).
En cuanto a los informes europeos, la situación aquí sigue siendo incierta: los informes no inclinaron la balanza a favor de un aumento de tasas de 25 o 50 puntos en la reunión de mayo. Según algunos expertos, el débil crecimiento del PIB de la zona euro obligará al BCE a recurrir a un aumento de 25 puntos. Pero no debemos olvidar que el índice de precios al consumo básico en la zona euro alcanzó un máximo histórico nuevamente en marzo, después de lo cual muchos representantes del BCE hablaron sobre la necesidad de subir las tasas en 50 puntos de inmediato. Si la inflación paneuropea de abril refleja un mayor crecimiento del IPC básico, entonces el débil crecimiento del PIB, en mi opinión, no será un obstáculo para la implementación del escenario de 50 puntos.
Por lo tanto, a partir de "ahora", la situación con el par sigue siendo incierta. Los operadores no pudieron determinar la dirección del movimiento del precio en medio de un panorama fundamental contradictorio. Se necesita un desencadenante de información correspondiente para sacar el precio del rango de 1,0960-1,1070. Obviamente, los operadores dudan en abrir grandes posiciones antes de las reuniones de mayo de la Fed y el BCE. Los bancos centrales ayudarán a los operadores de EUR/USD a resolver el rompecabezas fundamental que ha surgido.
