Cuando los inversores reaccionaron al brutal ataque de Hamás contra Israel el sábado, la demanda de activos refugio aumentó y dio al oro un nuevo impulso alcista.
Muchos analistas creen que la escalada de tensiones en Oriente Medio es sólo el último factor geopolítico que seguirá apoyando al metal precioso en 2024.
El domingo, el gobierno israelí declaró oficialmente la guerra y tomó la medida en respuesta a Hamás tras el ataque sorpresa del sábado en el que murieron cientos de israelíes.
Naturalmente, la economía mundial y los mercados financieros serán sensibles a la escalada bélica. Los analistas políticos comentan que el aumento de las tensiones podría atraer al conflicto a otros países, como Irán y Estados Unidos, con la consiguiente repercusión en los mercados energéticos y la inflación.
Desde el punto de vista de Ipek Ozkardeska, analista de Swissquote Bank, el hecho de que Irán y EE.UU. estén envueltos en el conflicto sugiere que las tensiones podrían intensificarse aún más. Es difícil predecir el precio del petróleo debido a la agitación geopolítica, pero el nivel de 90 dólares por barril podría proporcionar un suministro decente para el petróleo estadounidense, ya que la escalada y la prolongación de las tensiones en Oriente Medio podrían ser la gota que colme el vaso y acerque al mundo al borde de la recesión y merme el apetito por el petróleo.
En cuanto al oro, a pesar del buen potencial alcista, incluso con la ayuda de la geopolítica, los rendimientos de los bonos siguen siendo elevados. El rendimiento de los bonos estadounidenses seguirá siendo un factor decisivo para la evolución del precio del metal precioso a medio y largo plazo. De momento, los bonos siguen una senda alcista.
Según los analistas, a pesar de que los problemas en Oriente Medio no se resolverán en un futuro próximo, aunque las tensiones disminuyan, los precios del oro podrían volver a su soporte de 1820 $. Al mismo tiempo, el metal amarillo sigue siendo un importante refugio seguro, ya que el papel del dólar estadounidense como moneda de reserva mundial continúa debilitándose.
Además, según los analistas, en particular el analista de mercado senior de OANDA Edward Moya, el aumento de la deuda y el déficit en EE.UU. afectan al mercado de bonos, por lo que está surgiendo un nuevo conflicto en Oriente Medio. Observa que los inversores extranjeros ya se muestran reacios a comprar deuda estadounidense. Pero la guerra en Israel ha creado un nuevo desafío que podría apoyar los precios del oro.