O bien un posible acuerdo entre Israel y Hamás ha quitado algo de aire al mercado del petróleo, o bien el oro negro está cansado de la geopolítica. El Brent reacciona con cierta lentitud a los rumores de que los líderes militantes han aceptado una oferta de alto el fuego de Qatar y Egipto a cambio de un intercambio de rehenes. Mientras tanto, los ataques israelíes contra Rafah, en el sur de Gaza, no han impresionado especialmente a los alcistas. El mercado se prepara para la actualización de las previsiones de la Administración de Información Energética estadounidense, que hasta ahora eran las más "bajistas" de todas las organizaciones de renombre, lo que mantiene los precios bajo presión.
Previsiones de la demanda mundial de petróleo
En las dos últimas semanas, la prima de riesgo geopolítico del Brent ha caído unos 7 dólares por barril debido a la desescalada de los conflictos en Oriente Próximo. Como consecuencia, los derivados han reducido del 17% al 9% la probabilidad de que el crudo del Mar del Norte alcance la barrera psicológica de los 100 dólares a finales de año.
La presión sobre el oro negro está siendo ejercida por la intervención verbal de la Casa Blanca, que declaró que EE.UU. dispone de reservas estratégicas suficientes para hacer frente a cualquier problema de suministro y sigue de cerca la evolución de los mercados. Estas palabras recuerdan la mayor venta de petróleo de las reservas estratégicas, 180 millones de barriles, desde que comenzó el conflicto en Ucrania en 2022.
Además, el inesperado y rápido aumento de los inventarios estadounidenses en 7,3 millones, hasta 460,9 millones de barriles, en la semana hasta el 26 de abril, indica un aumento de la producción y una menor demanda, lo que es bajista para el Brent y el WTI. Y aunque se espera que la cifra descienda en 1,2 millones de barriles al final del periodo de cinco días hasta el 3 de mayo, existe cierta preocupación en el mercado de que esto no ocurra.
Al petróleo no le ayuda la subida de los índices bursátiles estadounidenses y mundiales tras la publicación de un decepcionante informe sobre el mercado laboral estadounidense correspondiente al mes de abril. La ralentización del empleo, los salarios medios y el aumento del desempleo han hecho renacer las esperanzas de que la Fed recorte la tasa de los fondos federales al menos dos veces en 2024. Eso crea un viento a favor para las acciones. Pero no para el oro negro, que muestra su preocupación por la ralentización de la economía estadounidense y la demanda mundial.
Dinámica del petróleo y de los índices bursátiles mundiales
Por otro lado, están las recientes aclamaciones de China y la Eurozona, las positivas perspectivas económicas mundiales del FMI y la OCDE, y el posible debilitamiento del dólar en medio de la sincronización del PIB mundial y la pérdida del índice del dólar de una carta de triunfo como el excepcionalismo estadounidense. Esto podría respaldar al Brent incluso mientras el conflicto en Oriente Próximo sigue agotándose. Lo cual, en mi opinión, no acabará tan rápido como les gustaría a los "osos" del crudo en el Mar del Norte.
Técnicamente, en el gráfico diario del Brent se observa una corrección de la tendencia alcista. Si los "toros" logran aferrarse a la zona de convergencia de 82,8-83,5 dólares por barril, será la base para la toma de beneficios en los cortos formados desde el nivel de 86,5 dólares y la reversión. Por el contrario, la ruptura de soportes importantes es un motivo para la venta.
