Las cotizaciones del "metal amarillo" se dispararon el lunes a nuevos máximos sobre el trasfondo de dos importantes factores que parecen estar empujándolas al alza en un futuro próximo.
Después de que el precio del oro alcanzara un mínimo local a principios de mayo en la ola de la caída de las expectativas de flexibilización de la política monetaria del Sistema de la Reserva Federal en el año en curso, así como la estabilización de la situación geopolítica en Oriente Próximo, su reanudación comenzó gradualmente. La razón de ello fue, en primer lugar, la persistencia del mayor grado de incertidumbre en el desarrollo de los acontecimientos en torno al enfrentamiento entre Teherán y Tel Aviv. Además, los datos actualizados del mercado laboral estadounidense, que mostraron un fuerte descenso del número de nuevos puestos de trabajo en abril, empezaron a dar esperanzas a los inversores de que la Reserva Federal aún podría empezar a reducir los tipos de interés este año.
Hoy, la fuerte subida del precio del oro, que rompió su reciente máximo local y llegó a alcanzar los 2449,70 $ por onza, vino dada por la noticia de los medios estatales iraníes de que el presidente Ebrahim Raisi había muerto en un accidente de helicóptero. Aún no está claro si se trata de un atentado terrorista o de un accidente. Por supuesto, esta noticia ha aumentado la incertidumbre política en Oriente Próximo y, junto con las crecientes expectativas de que la Reserva Federal pueda recortar los tipos de interés dos veces este año, ha provocado una subida de las cotizaciones del "metal amarillo" y no sólo de él.
Las noticias procedentes de Irán también apoyan los precios del crudo, ya que una posible escalada de la crisis en Oriente Próximo podría repercutir negativamente en gran medida en el flujo de petróleo y derivados hacia el mercado mundial. Otro factor positivo que contribuye al crecimiento de los precios del "oro negro" es la posición de la OPEP+ Rusia, que sigue manipulando el nivel de precios en función de sus intereses y de la demanda global del mercado. Ahora, a la luz de los acontecimientos de Irán, los inversores esperan con impaciencia los resultados de la reunión de la OPEP+ Rusia, prevista para el 1 de junio. En ella se decidirán los volúmenes de producción a partir del segundo trimestre de este año.
¿Qué cabe esperar hoy en los mercados?
Creo que las noticias presentadas anteriormente, así como un cambio brusco en el sentimiento de los participantes en el mercado respecto a las perspectivas de relajación de la política monetaria de la Reserva Federal, pueden apoyar la demanda de acciones de empresas y ejercer presión sobre el tipo de cambio del dólar a través de la dinámica de los rendimientos de los bonos del Tesoro. Creo que, a la luz de los factores de apoyo a los precios del oro y del petróleo descritos en el artículo, cabe esperar una ligera corrección de los precios del "metal amarillo" y un fortalecimiento de la subida de los precios del "oro negro".
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