Al final de la última sesión regular, los índices bursátiles estadounidenses cerraron de forma mixta. El S&P 500 subió un 0,13%, mientras que el Nasdaq 100 cayó un 0,13%. El Dow Jones Industrial perdió un 1,33%.
El tipo de cambio de la moneda estadounidense alcanzó sus valores mínimos desde principios de 2024, mientras que los futuros sobre los principales índices bursátiles de EE. UU. mostraron un descenso. Esta dinámica se debió a las críticas del presidente Donald Trump sobre el trabajo de la Reserva Federal, lo que generó preocupación sobre la independencia del regulador. Tras la declaración del director del Consejo Económico Nacional, Kevin Hassett, sobre la posibilidad de que Trump considere la destitución del presidente de la Fed, Jerome Powell, el dólar perdió posiciones frente a todas las principales divisas, lo que devolvió la presión sobre los futuros de los índices bursátiles estadounidenses ya durante la sesión asiática de hoy.
Según los datos, los comentarios provocaron ventas activas del dólar por parte de fondos de cobertura el lunes. El oro, que tradicionalmente muestra una correlación inversa con el dólar, alcanzó niveles récord. Los bonos del Tesoro se abarataron y el yen se fortaleció.
A finales de la semana pasada, decepcionado por la negativa del banco central a reducir las tasas de interés, Trump expresó su descontento en las redes sociales, afirmando que la destitución de Powell no podía producirse lo suficientemente rápido, sin descartar tal escenario. Estos ataques contra la Fed no solo socavan el principio de independencia del banco central, sino que también crean el riesgo de una politización de la política monetaria de EE. UU., lo que podría causar una gran preocupación en los mercados. Sin embargo, cabe recordar que este tipo de declaraciones ya se hicieron durante el primer mandato de Trump en relación con el mismo Powell, pero la destitución nunca llegó a materializarse.
Sin embargo, ahora la situación es algo diferente. La inflación en EE. UU. está bajando, pero las tasas de interés no. Además, los datos económicos apuntan a la posibilidad de una recesión, lo que crea una situación extremadamente difícil para el banco central. Por un lado, es necesario seguir endureciendo la política monetaria para combatir la inflación, cuyo crecimiento se producirá próximamente tras la imposición de aranceles comerciales por parte de Trump, y por otro, es necesario tener en cuenta los riesgos para el crecimiento económico.
Esta presión por parte del presidente de EE. UU. podría socavar la independencia del banco central, lo que a largo plazo podría afectar negativamente a la estabilidad del sistema financiero. La destitución de Powell, si se produjera, podría causar importantes turbulencias en los mercados financieros. Los inversores temerían la incertidumbre respecto al futuro de la política monetaria y podrían reaccionar negativamente ante el cambio en la dirección de la Fed. Además, esto podría socavar la confianza en la economía estadounidense en su conjunto.
En cuanto al panorama técnico del S&P 500, la tarea principal de los compradores hoy será superar la resistencia más cercana en $5269. Esto ayudaría a mostrar crecimiento, así como abriría la posibilidad de un impulso hacia un nuevo nivel en $5305. Una tarea no menos prioritaria para los alcistas será el control sobre los $5342, lo que fortalecería las posiciones de los compradores. En caso de descenso en el contexto de una menor demanda de riesgo, los compradores deberán manifestarse en la zona de $5226. Una ruptura empujaría rápidamente el instrumento de negociación de nuevo hacia los $5164 y abriría el camino hacia los $5084.