Japón sorprendió a la comunidad económica internacional. Se ha beneficiado plenamente de las oportunidades surgidas tras el levantamiento de las medidas restrictivas.
Así, de julio a septiembre, el PIB de Japón se disparó a un récord de 21,4% anual. Es la lectura más alta de los últimos 40 años. Tal aumento en la economía fue causado por la flexibilización de las medidas de confinamiento impuestas para combatir la propagación del virus. Las autoridades del país lanzaron una gran campaña destinada a reactivar el turismo local y la gastronomía. La política competente condujo a resultados significativos. En el tercer trimestre del año, el PIB de Japón se disparó un 21,4% en comparación con el mismo período del año anterior. Este aumento ha compensado parcialmente una caída del 28,1% que se produjo en el segundo trimestre. Como resultado, el PIB de la nación ascendió a 508 billones de yenes anualizados, equivalente a $4,85 billones.
Además, el gasto de los consumidores y del gobierno, así como las exportaciones, registraron un aumento por primera vez en los últimos tres trimestres. Estos datos positivos impulsaron los índices bursátiles japoneses. Por lo tanto, en la Bolsa de Valores de Tokio, el Nikkei estableció varios récords durante una sesión de negociación.
