Tras un cierre plano en la sesión anterior, los bonos del Tesoro experimentaron una importante tendencia alcista en la negociación del viernes. Los precios de los bonos experimentaron subidas tempranas y se mantuvieron firmes durante toda la sesión, con lo que la rentabilidad de la nota de referencia a diez años bajó 5,3 puntos básicos, hasta el 4,218%. Se trata del cuarto cierre de sesión consecutivo a la baja para la rentabilidad a diez años, desde que el lunes alcanzara un máximo de cierre de tres meses.
El comportamiento positivo de los bonos del Tesoro se debe a las previsiones optimistas de los operadores sobre los tipos de interés. Este optimismo surgió del reciente anuncio de la Reserva Federal sobre política monetaria. Aún existe cierta incertidumbre sobre el calendario del primer recorte de tipos, pero la posibilidad de un recorte de tipos de un cuarto de punto en junio ha aumentado hasta el 66,5%, según los datos de la herramienta FedWatch del CME Group.
A pesar del dinamismo de la negociación, la actividad general se mantuvo algo moderada. La falta de datos económicos significativos en Estados Unidos hizo que algunos operadores se contuvieran. La semana que viene podría verse influenciada por las ventas de viviendas nuevas, los pedidos de bienes duraderos, la confianza de los consumidores y las ventas pendientes de viviendas.
Cabe señalar que aunque está prevista la publicación de un informe que contiene los ingresos personales, el gasto y las lecturas de inflación importantes preferidas por la Reserva Federal, se publicará cuando los mercados estén cerrados por Viernes Santo.