En febrero, Singapur registró un aumento de la inflación de los precios al consumo, atribuido en gran medida al encarecimiento del alojamiento, los servicios y los alimentos. Esta información fue divulgada el lunes por la Autoridad Monetaria de Singapur y el Ministerio de Comercio e Industria.
El índice de precios al consumo experimentó una subida anual, avanzando un 3,4% en febrero. Esto supuso un aumento significativo respecto al 2,9% de enero y superó la previsión del 3,3%.
La inflación subyacente también experimentó un impulso considerable, alcanzando un máximo de siete meses del 3,6% desde el 3,1% del mes anterior.
Los datos detallados revelan que la inflación del alojamiento aumentó hasta el 3,9%, ya que los reembolsos adicionales por tasas de servicio y conservación, financiados en enero, no se distribuyeron en febrero.
La inflación de los servicios creció hasta el 4,2%, debido principalmente al aumento de las tarifas aéreas y a un incremento más pronunciado de los gastos en vacaciones. La inflación de los alimentos experimentó igualmente un aumento, pasando del 3,3% al 3,8%.
Considerando las estadísticas globales de 2024, se espera que tanto la inflación general como la subyacente se sitúen en una media de entre el 2,5% y el 3,5%.
Aunque estos datos son significativos, las autoridades han advertido de los riesgos persistentes de inflación. Estos riesgos podrían derivarse de aumentos repentinos de los costes mundiales de la energía y el transporte impulsados por disputas geopolíticas, de la subida de los precios de las materias primas alimentarias impulsada por condiciones meteorológicas desfavorables y de un mercado laboral nacional más tenso de lo previsto inicialmente.