El martes, el Banco Central de Sri Lanka bajó inesperadamente sus tipos de interés oficiales para impulsar la recuperación económica del país. La decisión, encabezada por el Gobernador del banco, Nandalal Weerasinghe, supuso una bajada de 50 puntos básicos del tipo de interés de la facilidad permanente de depósito, hasta el 8,50%, y del tipo de interés de la facilidad permanente de crédito, hasta el 9,50%. Esto sigue a un recorte acumulado de 650 puntos básicos en los tipos durante 2023.
El consejo del banco opinó que una mayor relajación de la política monetaria allanaría el camino para que los tipos de interés de mercado, en particular los de préstamo, siguieran bajando. Esto estimularía la continua expansión del crédito al sector privado, apuntalando así la actual reactivación de la actividad económica.
El Consejo también señaló que los posibles riesgos de inflación a corto plazo no alterarían significativamente la previsión de inflación a medio plazo. Consideran probable que la actividad económica se mantenga moderada durante un tiempo considerable. Los responsables políticos subrayaron la necesidad de una transmisión rápida y completa de las medidas de relajación monetaria a los tipos de interés de mercado, acelerando la normalización de estos tipos en el futuro.
En febrero, la inflación general se ralentizó hasta el 5,9% desde el 6,4% del mes anterior. Se prevé que se suavice en los próximos meses, alineándose finalmente con el nivel objetivo.
Las conversaciones de la semana pasada entre el personal del Fondo Monetario Internacional y las autoridades de Sri Lanka desembocaron en un acuerdo sobre estrategias económicas. Una vez ratificado por el FMI, Sri Lanka podrá acceder a 337 millones de dólares del paquete de rescate de 3.000 millones.