En febrero de 2024, México reportó un déficit fiscal que superó las expectativas, con un saldo de -263.06 mil millones de pesos. Este resultado representa un incremento significativo en comparación con el período anterior, cuando se registró un déficit de -159.14 mil millones de pesos en febrero de 2024. Los datos actualizados más recientes, del 27 de marzo de 2024, confirman esta tendencia de deterioro en las finanzas públicas mexicanas.
La magnitud del déficit fiscal actual refleja los desafíos que enfrenta el país en términos de manejo de sus cuentas públicas y la necesidad de implementar medidas efectivas para revertir esta tendencia. Expertos señalan la importancia de fortalecer la recaudación de ingresos y controlar el gasto público para evitar mayores desequilibrios en las finanzas nacionales. El impacto de este déficit podría tener implicaciones en la economía mexicana en términos de estabilidad financiera y atractivo para inversiones extranjeras.
