Rusia experimentó un importante crecimiento de su industria manufacturera en marzo, según los datos de una encuesta de directores de compras de S&P Global. El ritmo de crecimiento fue el más rápido en más de diecisiete años, impulsado por un extraordinario aumento de la demanda de los clientes.
El Índice de Gerentes de Compras (PMI) del sector manufacturero ruso de S&P Global indica que el crecimiento de la industria pasó de 54,7 en febrero a 55,7 en marzo. Una cifra del PMI superior a 50 sugiere expansión en el sector. Los resultados de la industria manufacturera en marzo fueron los mejores desde agosto de 2006.
Este crecimiento se vio impulsado por los aumentos de la producción y de los nuevos pedidos, que avanzaron a su ritmo más rápido en más de dieciséis años. Según los fabricantes, el crecimiento de los nuevos pedidos se debió a la mejora de las condiciones de la demanda, al éxito de los esfuerzos de marketing y a la captación de nuevos clientes.
Por primera vez en cinco meses, aumentó la demanda de nuevas exportaciones. Este fue el crecimiento más rápido desde el agosto anterior y dio lugar al crecimiento de la producción al ritmo más rápido desde enero de 2017.
Al aumentar las necesidades de producción, los productores de bienes también aumentaron el empleo, y la creación de puestos de trabajo se produjo al ritmo más rápido desde noviembre de 2000.
Aunque se produjo un retroceso en el rendimiento de los proveedores y en los retrasos en los envíos, la inflación de los precios de los insumos en marzo disminuyó. La inflación de los precios de venta también descendió a su punto más bajo en nueve meses.
La confianza empresarial de los productores de bienes también creció en marzo debido a las sólidas condiciones de la demanda, que a su vez aumentaron las expectativas de producción.
