En marzo, el sector manufacturero griego experimentó su crecimiento más significativo en más de dos años, impulsado por la sólida demanda de los clientes nacionales e internacionales, según los resultados preliminares de la encuesta de S&P Global.
El Índice de Gerentes de Compras (PMI), indicador económico del sector manufacturero, aumentó de 55,7 en febrero a 56,9 en marzo. Una lectura del PMI superior a 50 representa crecimiento dentro del sector.
Esto refleja el avance más rápido de la salud del sector desde febrero de 2022. Los nuevos pedidos crecieron al ritmo más rápido desde noviembre de 2021, impulsados por el aumento de la demanda de los clientes nacionales e internacionales.
Como consecuencia, las empresas aumentaron la producción y el empleo. El nivel de producción aumentó al mayor ritmo desde agosto de 2021.
Sin embargo, los fabricantes griegos volvieron a experimentar interrupciones en la cadena de suministro en marzo, con retrasos significativos en los plazos de entrega de los insumos.
En términos de precios, los costes de los insumos aumentaron al ritmo más rápido en más de un año, impulsados por los aumentos de los costes de las materias primas y el transporte de los proveedores. Además, la inflación de los precios de producción se mantuvo en un nivel históricamente alto durante todo el mes de marzo.
A pesar de estos retos, los productores griegos de bienes mantuvieron en gran medida la esperanza de un aumento de la producción durante el próximo año. Sin embargo, el nivel de optimismo cayó a su nivel más bajo en tres meses.
