Wells Fargo & Co. (WFC) reveló recientemente que despidió a más de una docena de empleados el mes pasado por presuntamente falsificar actividades laborales, según indicó un informe de Bloomberg que hace referencia a una declaración de la Financial Industry Regulatory Authority (FINRA).
Según la declaración, los empleados fueron "despedidos después de una revisión de acusaciones de simular actividad en el teclado para crear la impresión de que estaban trabajando activamente."
Dispositivos como movemouses o "jigglers" son comúnmente utilizados por algunos empleados para evitar que sus computadoras entren en modo de reposo, dando así a los empleadores la percepción de que están trabajando activamente.
La declaración no especificó si los empleados despedidos estaban trabajando de forma remota o desde la oficina en el momento de los incidentes.
Un portavoz de Wells Fargo declaró: "Wells Fargo mantiene a los empleados con los más altos estándares y no tolera conductas no éticas."
Tras la pandemia en 2022, el banco implementó un modelo de trabajo híbrido flexible y solicitó que los empleados regresaran a la oficina.
De manera similar, otros bancos han tomado medidas para asegurar el cumplimiento de las políticas de trabajo en la oficina. Bank of America (BAC) emitió "cartas de educación" en enero, advirtiendo que se tomarían acciones disciplinarias contra los empleados que no regresaran a la oficina. Además, Goldman Sachs (GS) requirió el año pasado que los empleados trabajaran en la oficina cinco días a la semana, según The Guardian.
