El miércoles, el índice DAX de Frankfurt disminuyó aproximadamente un 1,2%, cerrando en 22,839. Este movimiento fue consistente con las caídas observadas en otros grandes mercados, ya que aumentaron las preocupaciones sobre las políticas arancelarias de EE. UU. y sus implicaciones para el crecimiento económico global. Los informes indicaron que el presidente Donald Trump podría anunciar nuevas medidas comerciales de manera inminente, potencialmente incluyendo aranceles a las importaciones de automóviles. Los inversores ya estaban cautelosos debido a la incertidumbre inminente de los aranceles que se establecerán el 2 de abril. A nivel corporativo, las empresas farmacéuticas, sectores tecnológicos y acciones automotrices enfrentaron una presión significativa. Notablemente, Porsche SE, el mayor accionista de Volkswagen, experimentó una disminución de casi el 1% en el valor de sus acciones tras revelar una pérdida de €20 mil millones después de impuestos, a pesar de presentar planes para aumentar las inversiones y diversificar su cartera.