El S&P Global US Services PMI cayó a 51.4 en abril de 2025, desde 54.4 en marzo, quedando por debajo de las predicciones del mercado de 52.5. Esto representa la segunda tasa de crecimiento más lenta en la actividad de servicios del último año, solo superada por la lectura de febrero de 51, según los datos preliminares. La desaceleración se atribuye principalmente a una notable desaceleración en los nuevos pedidos, con empresas señalando la incertidumbre de los clientes derivada de problemas arancelarios y un entorno económico inestable, afectando particularmente a los pedidos extranjeros. La débil demanda llevó a los proveedores de servicios a reducir sus esfuerzos de contratación, sumado a una disponibilidad laboral cada vez más escasa. En cuanto al ámbito de precios, la inflación de costos de insumos alcanzó un máximo de siete meses, lo que llevó a las empresas a aumentar sus precios de salida. Mirando hacia el futuro, el sentimiento empresarial con respecto a la producción para el próximo año cayó a su punto más bajo desde octubre de 2022, impulsado por políticas económicas inciertas de la nueva administración presidencial.