El yen japonés se apreció más allá de 143 frente al dólar el jueves, deteniendo un descenso de dos días a medida que los inversores buscaban refugio en activos seguros en medio de una creciente incertidumbre comercial. Este cambio en el sentimiento del mercado fue provocado por informes que sugerían que la administración de Trump podría reducir los aranceles sobre los bienes chinos, condicionados al éxito de posibles negociaciones. En respuesta, China expresó su disposición a entablar un diálogo, siempre y cuando los EE. UU. cesen de emitir más amenazas. No obstante, el Secretario del Tesoro de EE. UU., Scott Bessent, moderó las expectativas, aclarando que no se han iniciado negociaciones formales y no se han sugerido reducciones de aranceles de manera independiente. Añadiendo a la perspectiva moderada, se informó que EE. UU. informó a la delegación comercial de Japón que a Tokio no se le concederían excepciones bajo la política arancelaria actual de EE. UU., a pesar de las apelaciones de Japón para su reconsideración.