Los futuros del crudo Brent superaron los $64 por barril el lunes, alcanzando un máximo de casi dos semanas. Este aumento fue impulsado por el progreso en las discusiones comerciales entre Estados Unidos y China, aliviando las preocupaciones sobre la demanda de estos importantes consumidores de petróleo. Tanto el Secretario del Tesoro de EE. UU., Scott Bessent, como el Representante de Comercio, Jamieson Greer, expresaron optimismo tras las conversaciones del fin de semana, prometiendo ofrecer más detalles el lunes, un sentimiento que fue compartido por funcionarios chinos. A pesar del aumento, los precios del petróleo estuvieron limitados por los planes de la alianza OPEP+ de acelerar los aumentos de producción en mayo y junio. Además, la posibilidad de un acuerdo nuclear entre Estados Unidos e Irán contribuyó a la presión a la baja, ya que podría mitigar los temores de una escasez global de suministro de petróleo. Representantes de Estados Unidos e Irán concluyeron conversaciones en Omán el domingo, con más discusiones en el horizonte, mientras Teherán reiteró su compromiso con el enriquecimiento de uranio.