El viernes, los futuros del crudo WTI experimentaron un aumento del 1.9%, cerrando en $64.60 por barril. Esto marca su primer ascenso semanal en tres semanas, con un aumento de más del 6.5%. El repunte surgió del renovado optimismo tras la reanudación de las discusiones comerciales entre el presidente de EE.UU., Donald Trump, y el presidente de China, Xi Jinping, lo que fortaleció las esperanzas de una mayor demanda global. El sentimiento mejoró aún más con la entrada de Canadá en negociaciones comerciales directas con EE.UU. A pesar de estas ganancias, el mercado del petróleo sigue siendo susceptible a la volatilidad debido a las tensiones geopolíticas, como la posibilidad de que EE.UU. imponga mayores sanciones a Venezuela y potenciales ataques israelíes a instalaciones iraníes. En cuanto a la oferta, Arabia Saudita redujo sus precios de crudo de julio para Asia a casi mínimos de dos meses, un recorte menor en comparación con las expectativas, luego del acuerdo de la OPEP+ para aumentar la producción en 411,000 barriles por día. Este movimiento refleja los esfuerzos por equilibrar la creciente demanda con niveles de producción disciplinados.