Los futuros del aluminio han avanzado hacia $2,600 por tonelada, manteniéndose cerca del pico de tres meses de $2,628 alcanzado el 2 de julio. Este movimiento refleja expectativas de una reducción en la oferta juntamente con un pronóstico moderado para la demanda manufacturera. Se anticipa que la producción en China, el principal productor de aluminio, disminuirá este año ya que se ha establecido un límite anual de producción de 45 millones de toneladas para facilitar los objetivos de emisiones de carbono. Paralelamente, se proyecta un aumento de la demanda en Europa, ya que las naciones de la UE indican planes para incrementar la fabricación de productos de defensa, mientras que el suministro a las fábricas europeas sigue siendo limitado debido a las sanciones contra Rusia, un importante productor. En la Bolsa de Metales de Londres (LME), las existencias disponibles han aumentado desde el comienzo del año, aunque los inventarios totales en la LME y en la Bolsa de Futuros de Shanghái (SHFE) son aproximadamente un 60% más bajos en comparación con el mismo período del año pasado. A pesar de esto, el Índice oficial de Gerentes de Compras (PMI) del sector manufacturero de la Oficina Nacional de Estadísticas de China (NBS) ha reportado otro mes de contracción en el sector.