El viernes, el FTSE 100 avanzó por segunda sesión consecutiva, acercándose al umbral de los 9,000 puntos, impulsado por ganancias en los sectores de energía, minería y comercio minorista. Las acciones de BP aumentaron más del 1.5% tras el anuncio de vender sus operaciones eólicas terrestres en EE.UU. a LS Power, como parte de una estrategia de desinversión de $20 mil millones destinada a simplificar operaciones y enfocarse en activos selectos de bajo carbono. Shell también experimentó un aumento de más del 1%, mientras que Rio Tinto vio un incremento de más del 1% debido al aumento de los precios del mineral de hierro. En el sector minorista, las acciones de Burberry saltaron hasta un 5.8% después de que un informe comercial superara las expectativas, mostrando caídas en las ventas menores a lo anticipado e indicando progresos en su estrategia de recuperación, pese a los desafíos continuos en los principales mercados asiáticos. Por el contrario, GSK enfrentó un revés, ya que sus acciones cayeron más del 6% después de que su tratamiento para el cáncer de sangre, Blenrep, no lograra el respaldo de un comité asesor de la FDA de EE.UU. Los analistas destacaron el impacto potencial en los ingresos proyectados, dado que el medicamento juega un papel crucial en los planes de crecimiento de GSK. La decisión final de la FDA se anticipa para el 23 de julio.