Los futuros del café arábica se han mantenido por encima de $4.10 por libra, rondando sus niveles máximos para octubre, impulsados por indicios de un ajuste en los suministros globales. Según la Organización Internacional del Café (ICO), las exportaciones mundiales de café para el año comercial actual (de octubre a septiembre) han disminuido un 0.3% interanual, situándose en 138.658 millones de sacos. Los fundamentos del mercado son sólidos, apoyados por bajos niveles de inventario e incertidumbres relacionadas con el clima que afectan a las principales naciones productoras de café. El cambio climático está impactando la producción, con Brasil experimentando precipitaciones por debajo de lo normal y regiones como Centroamérica y Vietnam enfrentando eventos climáticos extremos, como el Huracán Melissa y el Tifón Kalmaegi, respectivamente. La ICO también ha destacado que los retrasos en el transporte debido a la escasez de contenedores y las restricciones en el Canal de Suez están agravando las presiones de suministro. Los comerciantes están monitoreando de cerca los desarrollos en las negociaciones entre Brasil y los Estados Unidos, buscando eliminar el arancel del 40% sobre las exportaciones de café brasileño. Además, un real brasileño más fuerte ha impulsado aún más los precios al hacer que las exportaciones locales sean menos atractivas para los productores.