Los futuros del caucho han aumentado a más de 170 centavos de dólar por kilogramo, alcanzando un máximo de una semana. Este aumento se atribuye en parte al alza de los precios del petróleo, lo que hace que las alternativas sintéticas sean menos atractivas. Sin embargo, el pronóstico de la demanda sigue siendo incierto debido a la débil demanda de China y las persistentes disrupciones en la cadena de suministro que impactan a la industria automotriz global. En cuanto a la oferta, las principales naciones productoras de caucho en el sudeste asiático, como Tailandia, Vietnam e Indonesia, están lidiando con condiciones meteorológicas desfavorables tras el paso de poderosos tifones por la región.