Según JPMorgan Chase & Co. los riesgos que implica El Salvador tras la introducción del bitcoin como moneda de curso legal son muy importantes, lo que podría crear una serie de problemas tanto para el país como para la criptomoneda.
En la actualidad, el bitcoin se opera en torno a los 40.000-50.000 millones de dólares al día, pero la mayor parte pasa por los principales mercados de criptomonedas. Otra parte del bitcoin está encerrada en direcciones sin liquidez, y más del 90% de estos bitcoins no cambian de manos en un año o más.
A raíz de las declaraciones de las autoridades de El Salvador, la actividad diaria de pagos con bitcoin en el propio país se ha disparado hasta el 4% de las transacciones en la red, lo que supone alrededor del 1% del total de tokens emitidos. Esto podría tener un serio impacto en las perspectivas del bitcoin como medio de volumen.
La iniciativa del presidente de El Salvador, Nayib Buquele, de convertir el bitcoin en moneda de curso legal en el país ha suscitado un gran debate sobre si es beneficioso y qué problemas podría causar. Buquele, de 39 años, dijo que el bitcoin ayudaría a contrarrestar el bajo nivel de servicios bancarios del país y a reducir el coste de las remesas. Pero el Fondo Monetario Internacional, que ahora está negociando su programa de préstamos con El Salvador, se encuentra entre los que cuestionan esa lógica. Incluso muchos partidarios del Bitcoin dicen que éste es un buen instrumento de ahorro, pero que su utilidad como mecanismo de pago es muy limitada.
El FMI cree que la adopción de bitcoin como moneda de curso legal en El Salvador podría conllevar una serie de riesgos y problemas por parte del banco central. La adopción del bitcoin como moneda de curso legal plantea una serie de cuestiones macroeconómicas, financieras y jurídicas que requieren un cuidadoso análisis. Los expertos del FMI creen que los criptoactivos pueden plantear riesgos considerables y que es muy importante adoptar medidas reguladoras eficaces cuando se trata de ellos.
Además de esto, JPMorgan también ve otros problemas relacionados con El Salvador y el bitcoin. Recientes encuestas entre expertos sugieren un escepticismo bastante generalizado sobre el bitcoin como medio de cambio. La alta volatilidad del bitcoin representa otro problema junto con la dolarización oficial en el país. Un desequilibrio persistente en la demanda de conversión de bitcoins a y desde dólares estadounidenses podría afectar gravemente a la liquidez del dólar, lo que en última instancia provocaría problemas fiscales y el riesgo de una balanza de pagos hinchada, según JPMorgan.
Hay que recordar que El Salvador acaba de aprobar una ley que permite a las empresas aceptar bitcoins a cambio de bienes y servicios. El presidente de El Salvador, Nayib Buquele, dijo que la moneda digital ayudará a contrarrestar la baja situación de todo el sistema bancario de El Salvador y también reducirá el coste del envío de remesas. No olvidó mencionar el gran futuro de la economía del país gracias a la introducción del bitcoin.
En cuanto al panorama técnico del bitcoin, no ha cambiado en absoluto después del fin de semana. Los compradores tienen verdaderos problemas para superar la resistencia de los 36.000 dólares, lo que genera bastantes problemas para seguir creciendo. La ruptura de este rango dará lugar a una nueva onda alcista hacia el límite superior del canal lateral de 41.100 dólares. Sólo después de la ruptura de este rango es posible argumentar seriamente sobre una nueva ola de crecimiento del BTC a la zona de máximos - $ 46.700 y $ 52.000. Los osos tienen ante sí una tarea bastante complicada. En primer lugar, tienen que evitar que el bitcoin suba más allá de los 36.000 dólares, y una ruptura del límite inferior del canal lateral en torno a los 30.000 dólares hará que la cotización baje a los mínimos de 25.700 y 21.650 dólares.
