Algunos dijeron que el principal resultado de la reunión del FOMC de noviembre fue el inicio de la reducción gradual del programa de la EC. Otros pensaron que Jerome Powell insinuó un aumento de las tasas de los fondos federales en 2022. Yo le presté atención al silencio de la Fed sobre lo que está sucediendo en los mercados financieros. Teniendo en cuenta cómo reaccionaron antes el BCE y el Banco de la Reserva de Australia y un poco más tarde el Banco de Inglaterra, podemos suponer que la Fed está en general satisfecha con las señales dadas por los inversores, lo cual es una buena noticia para el dólar estadounidense.
Si el Banco Central Europeo o el RBA no están contentos con las proyecciones del mercado para una subida de tasas en 2022, normalmente lo anuncian. La Fed ha guardado tercamente silencio sobre el comportamiento de los futuros de CME, que indican un 70-75% de posibilidades de dos actos de restricción monetaria el próximo año y un 35-40% de posibilidades de tres. Supongo que la Fed tampoco descarta esa posibilidad. El regreso de la economía al pleno empleo a mediados del próximo año y la inflación que se mantiene en niveles altos pueden obligar a la Fed a endurecer su política monetaria.
Con base en la tendencia del PIB potencial real, las tasas en los Estados Unidos son actualmente extremadamente bajas y tienen margen para crecer.
TIPS gráfico de rendimiento y PIB real
La aceleración de la inflación estadounidense está respaldada por el aumento de los salarios, los precios de los automóviles usados y el aumento de los alquileres. Es probable que los sectores de tarifas aéreas y servicios turísticos mejoren a medida que la pandemia en los EE. UU. disminuya. El mismo factor puede contribuir a una recuperación del mercado laboral más pronunciada de lo esperado, así como a un crecimiento acelerado del PIB en el cuarto trimestre. Los indicadores económicos de EE. UU. superarán a sus homólogos europeos en los próximos meses, incluido el aumento de los casos de COVID-19 y la crisis energética en Europa. Todo lo anterior es una señal segura de que el par EUR/USD puede continuar su tendencia bajista.
La dinámica de las tasas de cambio está determinada por la política monetaria de los bancos centrales, lo que afecta el valor de los activos. En este sentido, el diferencial de los diferenciales de swap de tasas de interés indica que el potencial a la baja del principal par de divisas no se ha agotado. No es una gran noticia, ya que es probable que la Fed suba las tasas tres veces en 2022 y el BCE no lo hará hasta al menos 2023. Según Christine Lagarde, se requieren tres condiciones para el ajuste monetario, y no se cumplirán el año que viene.
EUR/USD y gráfico de diferencial real
Los datos sobre la inflación estadounidense de octubre se publicarán el 12 de noviembre. Según los expertos de Bloomberg, los precios al consumidor se acelerarán hasta el 5,5% y la inflación subyacente hasta el 4,1%. Sin embargo, las tasas pueden subir más en 2022.
Técnicamente, no hay razón para dudar de la fuerza de la tendencia bajista. Una nueva prueba de los mínimos de 16 meses puede formar el patrón AB = CD, cuyo objetivo al 200% corresponde al nivel de 1,135. Es mejor mantener posiciones cortas en EUR/USD desde el nivel de 1,1595 y aumentar su volumen en los retrocesos.
Gráfico diario EUR/USD