Los compradores de euros y libras se han tomado un descanso, y ahora mucho depende de si podrán salir de los próximos niveles de resistencia o no. De lo contrario, aumentará la presión sobre los activos de riesgo, lo que, a su vez, hará que las cotizaciones vuelvan a sus mínimos anuales o incluso que alcancen nuevos. La política más agresiva de la Reserva Federal es la razón principal por la que los operadores compran dólares, esperando mayores rendimientos de ellos en el futuro.
Pero recientemente, el gobierno de los EE.UU. está experimentando serios problemas, lo que hace que el Partido Demócrata pierda rápidamente la confianza de la población. Ayer, la secretaria del Tesoro de EE.UU., Janet Yellen, trató de corregir la situación y dijo que EE.UU. debería trabajar para liberarse de la dependencia de los países que suministran recursos críticos lo más rápido posible. En su opinión, esa es la razón por la que Estados Unidos está experimentando una inflación tan alta en la actualidad. Los problemas globales en la cadena de suministro están perjudicando la economía interna del país.
Yellen también señaló que EE.UU. depende en gran medida de China para los metales de tierras raras, que son componentes clave en la producción de una gama de materiales utilizados en todo. Según el USGS, China representa el 78% de las importaciones estadounidenses entre 2017 y 2020.
En cuanto a los precios, subieron a 8,6% en mayo, la tasa de crecimiento más rápida en cuatro décadas. Esto, junto con la respuesta agresiva de la Fed, alimenta los temores de que la economía se encamine hacia una recesión.
Todo esto no es beneficioso para los activos de riesgo, por lo que mucho dependerá de los niveles de resistencia. En EUR/USD, esto es 1,0500, cuya ruptura empujará al par a 1,0440. Una nueva caída empujará la cotización a 1,0380 y 1,0310. Mientras tanto, un regreso a 1,0550 provocará un aumento a 1,0600 y 1,0640.
