La volatilidad de los precios es el pan de cada día de un operador, pero en el caso del petróleo, la volatilidad se vuelve excesiva, alienando a los operadores y dificultando la vida de muchas empresas que utilizan habitualmente la cobertura del precio del petróleo para proporcionar cierta estabilidad de precios vital para sus operaciones. Según el análisis de Reuters, los precios del petróleo se han vuelto tan salvajes en sus fluctuaciones diarias que los fondos de cobertura están abandonando el mercado petrolero en masa. Y en los últimos siete años, su actividad ha caído al nivel más bajo.
Entonces resulta que la volatilidad solo es buena hasta cierto punto, y ese punto parece ser un rango de precios diario de cinco veces el rango normal. Según el análisis de Reuters, entre el 24 de febrero y el 15 de agosto de este año, el rango diario del crudo Brent promedió $5,64 por barril. Esto es un aumento desde $1,99 por barril el año pasado.
La salida de los especuladores es solo uno de los problemas de tan alta volatilidad en los precios del petróleo. El hecho de que las empresas de alimentos, por ejemplo, duden en protegerse contra futuras fluctuaciones de precios afecta su negocio. Y también afecta al negocio de la propia industria petrolera.
Las compañías petroleras temen los gastos de capital debido a la excesiva volatilidad en los mercados petroleros. Y como actúan con cautela, estas empresas posponen proyectos que podrían ayudar a reequilibrar el mercado petrolero.
Hablando de la industria petrolera, no es solo la volatilidad actual lo que obstaculiza el crecimiento potencial de la producción. También existe incertidumbre sobre la demanda futura a medida que se recupera el impulso de la transición.
Predecir la demanda de petróleo se está volviendo cada vez más difícil en medio de eventos como la famosa Ley de Reducción de la Inflación que el Congreso aprobó a principios de este mes.
Con todos estos incentivos para electrificar el transporte y avanzar hacia la generación de electricidad renovable, el futuro de la demanda de petróleo es incierto.
Se podría argumentar que la mayoría de las principales compañías petroleras están activamente involucradas en la transición energética, lo que podría empañar la credibilidad de sus pronósticos sobre la demanda de petróleo. Sin embargo, el hecho es que muchos gobiernos están decididos a hacer la transición, sin importar cuánto cueste, y esto tiene un impacto negativo en la demanda de petróleo.
El reciente impulso hacia la energía verde en Europa y EE. UU. probablemente empeoró la situación al nublar la perspectiva de la demanda. Sin embargo, está claro para todos que la demanda de petróleo en este momento es más alta de lo que muchos esperaban, especialmente porque algunas empresas de servicios públicos en Europa están cambiando del gas al petróleo debido a los precios.
Resultó ser demasiado no solo para los especuladores, sino también para los actores de la industria en el mercado petrolero.
Lo que sucederá en el futuro, como siempre, es imposible de decir, pero es poco probable que la situación de los precios cambie pronto. Esto significa que el efecto negativo que esta volatilidad de precios tiene en los negocios de todas las industrias continuará, alimentando las fluctuaciones antes mencionadas en los precios del petróleo.
Las empresas seguirán necesitando energía, que es limitada, pero los altos precios de la energía seguirán amenazando sus perspectivas de crecimiento y las de sus respectivas economías. Mientras tanto, los gobiernos continuarán invirtiendo dinero y creando leyes para una transición hacia la energía verde, lo que disuadirá aún más a la industria petrolera de hacer algo con respecto al suministro.
