Esta semana, el par euro-dólar se ha asentado firmemente en la octava figura, cambiando el nivel de precio de 1,0850 - 1,0930 al corredor 1,0800 - 1,0870. Tal dinámica de precios se debe principalmente al debilitamiento de la moneda europea. A su vez, el dólar estadounidense actúa como un aliado situacional para los vendedores de EUR/USD: el índice del dólar estadounidense gana impulso o disminuye, respondiendo al flujo actual de noticias.
Al analizar las operaciones intradiarias del par, se puede llegar a la conclusión obvia de que tanto los vendedores como los compradores del par muestran indecisión. Por ejemplo, el miércoles, el precio alcanzó un mínimo de dos meses por primera vez desde el descenso de junio a la base de la octava figura. Dado el ritmo rápido del declive, se podría suponer que el par superaría el nivel de soporte de 1,0800 y se asentaría en la séptima figura, pero no. Durante la sesión americana del miércoles, el impulso bajista se desvaneció rápidamente, después de lo cual los compradores tomaron el control: el par terminó ayer en la marca de 1,0864. Sin embargo, los alcistas de EUR/USD tampoco se beneficiaron de la situación: hoy, prevalecen los sentimientos bajistas para el par (de nuevo).
¿Qué indica esto? Principalmente, los operadores tienen dudas sobre las perspectivas de ambos escenarios, al alza y a la baja. Para un desarrollo estable de una tendencia al alza/baja, se necesita una razón informativa fuerte, mientras que en este momento, los participantes del mercado responden de manera impulsiva al flujo de noticias actual, que en su mayoría consta de factores fundamentales secundarios.
Por ejemplo, el impulso a la baja del miércoles se debió a los decepcionantes índices PMI. La actividad empresarial en la zona euro se contrajo mucho más de lo esperado, reflejando los crecientes problemas de la economía europea. Y aunque la contracción del sector manufacturero de Alemania (y la zona euro) se desaceleró, el sector de servicios entró inesperadamente en una fase de contracción. Todos los índices PMI de agosto de Alemania, Francia y la zona euro estuvieron por debajo de la clave marca de 50 puntos, lo que indica un empeoramiento de la situación en los respectivos sectores de la economía.
Tal resultado debilitó las expectativas agresivas de los operadores respecto a las futuras acciones del BCE. Se habla en el mercado de que después de la reunión de septiembre, el Banco Central Europeo hará una pausa, manteniendo todos los parámetros de la política monetaria sin cambios. En mi opinión, la inflación europea jugará un papel decisivo aquí, cuyo valor conoceremos la próxima semana. Sin embargo, en este momento, los decepcionantes índices PMI ciertamente jugaron su parte, permitiendo a los vendedores de EUR/USD actualizar el precio mínimo de dos meses.
Sin embargo, durante la sesión americana del miércoles, el dólar también estuvo bajo una presión significativa, permitiendo a los compradores recuperar posiciones perdidas. El dólar reaccionó negativamente a la publicación del PMI manufacturero de EE.UU. para agosto. El indicador estaba en la "zona roja", cayendo a 47 puntos (con un aumento previsto a 48 puntos). La estructura del informe indica que el índice de empleo disminuyó a 44,4 (desde un valor anterior de 48,1), y el componente inflacionario, el índice de precios, cayó a 41,8 (desde un 42,6 anterior). También cabe señalar que el PMI manufacturero ha estado por debajo de la clave marca de 50 puntos desde mayo de este año.
El PMI de servicios de EE.UU. también mostró una dinámica negativa. Aunque este indicador permanece "por encima de la línea de flotación", ha estado disminuyendo durante el tercer mes consecutivo, estableciéndose en la marca de 51 puntos en agosto.
Tales resultados socavaron las posiciones de los alcistas del dólar. Al mismo tiempo, los operadores ignoraron datos bastante fuertes en el sector del mercado inmobiliario (el volumen de ventas de nuevas viviendas en EE.UU. aumentó un 4,4% en julio, con un crecimiento previsto del 1%).
Ante el telón de fondo de los decepcionantes datos del PMI en EE.UU., el rendimiento del Tesoro a 10 años disminuyó en un 3%, ejerciendo presión adicional sobre el dólar. Además, el apetito por el riesgo aumentó en los mercados: los principales índices de Wall Street mostraron una dinámica positiva el miércoles, gracias a un aumento significativo en las acciones de las compañías tecnológicas. En particular, el índice Nikkei subió un 0,48% a 32.010,26 puntos, el nivel de cierre más alto desde el 15 de agosto. El índice más amplio, Topix, subió un 0,5% (a 2.277,05 puntos).
Por lo tanto, por un lado, el par mantiene un tono bajista: los vendedores de EUR/USD lograron cambiar el rango de precios y asegurarse dentro de la octava figura. Por otro lado, los impulsos bajistas actuales son efímeros, reemplazados por retrocesos al alza significativos. Está claro que tanto los vendedores como los compradores están a la espera del discurso del presidente de la Fed, Jerome Powell, programado para el viernes como parte del simposio económico en Jackson Hole. El jefe de la Reserva Federal puede "redibujar" significativamente el panorama fundamental para los pares del dólar, ya sea fortaleciendo el dólar estadounidense o debilitándolo con una retórica moderada. Dada tal incertidumbre, es prudente que el par mantenga una posición de esperar y ver.