Como se esperaba, la Fed mantuvo sin cambios las tasas de interés, pero en la persona de su líder alimentó una vez más a los mercados con la promesa de comenzar a bajarlas en los próximos meses.
La Fed mantuvo las tasas de los fondos federales en su nivel más alto en 23 años, entre el 5,25% y el 5,50%. Se trata de la octava reunión consecutiva en la que las tasas se mantienen sin cambios tras una reunión de los líderes de los bancos federales. En el comunicado se señalan algunos avances hacia el objetivo de inflación del 2%, aunque sigue estando por encima del nivel exigido. Además, los últimos datos estadísticos indican que la actividad económica del país sigue creciendo a un ritmo sólido. El crecimiento del empleo se ha ralentizado y la tasa de paro ha aumentado, pero aún está lejos de ser crítica. El regulador cree que hay movimientos en la dirección correcta en materia de empleo e inflación. No obstante, cree que es demasiado pronto para recortar las tasas, ya que no hay certeza de que la dinámica actual pueda ser sostenible.
Durante la rueda de prensa, el presidente de la Fed, J. Powell, dijo que un recorte de las tasas en septiembre podría estar sobre la mesa si la inflación cae en línea con las expectativas y que podría presentar escenarios en los que se decidiera recortar las tasas varias veces antes de finales de este año o dejarlas sin cambios.
Los mercados acogieron con satisfacción el próximo calmante de la Fed y siguieron comprando activamente acciones de empresas a pesar de todo, porque la razón principal no es sólo el hecho de los recortes de las tasas de interés en Estados Unidos, que, por cierto, ya han comenzado en otras regiones, como Europa, sino el deseo de utilizar la enorme masa monetaria acumulada para comprar activos reales, incluidas acciones de empresas.
En esta onda, los precios del oro y otros metales industriales, así como los del crudo, se deslizaron previsiblemente al alza. En el mercado de divisas, las principales monedas que se cotizan frente al dólar no han mostrado una dirección específica de movimiento y hasta ahora se están consolidando. Esto se debe a que los Bancos Centrales de los países a los que pertenecen ya han empezado a flexibilizar la política monetaria o tienen previsto hacerlo, como en el Reino Unido, donde el regulador local celebrará su reunión y se espera que reduzca las tasas de interés en un 0,25%, hasta el 5,00% desde el 5,25%.
El único beneficiario de las tendencias actuales es el yen japonés, que sigue subiendo frente a las principales divisas, especialmente aquellas en las que los Bancos Centrales han empezado a recortar imitativamente las tasas de interés.
Sigo considerando que comprar yenes frente a las principales divisas, así como comprar oro y petróleo crudo en los mercados al contado y de futuros, son excelentes ideas de inversión. El resto de pares de divisas probablemente se moverán sin una dirección definida.
Previsión del día:
GBP/JPY
El par se mueve por encima de 191,50 a la espera de la decisión del Banco de Inglaterra sobre las tasas de interés, cuya superación en la oleada de recortes de tasas podría reanudar la caída del precio hacia 188,00.
XAU/USD
El par podría corregirse hasta 2430,00 en una oleada de sobrecompra técnica local, tras lo cual es probable que reanude la subida hacia el reciente máximo de 2482,15.