El miércoles, el rendimiento del bono del Tesoro estadounidense a 10 años experimentó una reducción de aproximadamente 8 puntos básicos, situándose en 4.31%. Esta disminución continuó con la tendencia de la leve caída del martes, tras la declaración del presidente Trump asegurando que no hay planes para destituir al presidente de la Fed, Jerome Powell. Tales garantías parecían aliviar las preocupaciones del mercado sobre la intervención política en la política monetaria de EE.UU. y los posibles desafíos a la autonomía de la Reserva Federal. Además, un enfoque cada vez más diplomático de la administración Trump hacia China aumentó aún más la confianza de los inversores y alivió parte de la tensión que afectaba al mercado de bonos. A principios de mes, los rendimientos de los bonos del Tesoro de EE.UU. habían experimentado un fuerte aumento debido a la creciente incertidumbre política y al temor creciente de una inminente recesión.