El lunes, el rendimiento de los bonos del gobierno a 10 años de China subió aproximadamente al 1.65%, después de una sesión relativamente tranquila el viernes. Este aumento se produce mientras el optimismo en torno a los avances en las negociaciones comerciales entre Estados Unidos y China eclipsa los crecientes desafíos de deflación del país. La conclusión de dos días de intensas discusiones entre Estados Unidos y China tuvo lugar el domingo en Ginebra, con ambas partes anunciando "progresos sustanciales" en sus conversaciones. El Secretario del Tesoro de EE. UU., Scott Bessent, calificó las conversaciones como productivas, mientras que el Viceprimer Ministro de China, He Lifeng, mencionó un "consenso importante" logrado. Se espera con anticipación una declaración conjunta que se espera más tarde hoy, ya que los mercados observan atentamente acciones específicas que puedan estimular el sector exportador de China. Sin embargo, los datos de inflación de abril destacan la fragilidad económica en curso, con precios al consumidor disminuyendo un 0.1% interanual por tres meses consecutivos, y precios al productor cayendo un 2.7%, marcando la mayor disminución en seis meses. Estos datos apuntan a una debilitada demanda interna y riesgos externos crecientes, particularmente derivados de relaciones comerciales tensas y un mercado laboral lento.