El jueves, las acciones de EE. UU. experimentaron un notable aumento, con tanto el S&P 500 como el Nasdaq 100 alcanzando máximos históricos. Esta trayectoria alcista fue impulsada en gran medida por la reducción de tensiones geopolíticas, un sólido rendimiento en el sector tecnológico y un creciente optimismo respecto a posibles recortes en las tasas de interés. El S&P 500 aumentó un 0.8%, el Nasdaq subió un 1%, y el Dow Jones Industrial Average ascendió 390 puntos. La confianza de los inversores se vio fortalecida después de que la Casa Blanca minimizara los plazos de tarifas inminentes, aliviando los temores de una guerra comercial inminente. Además, la especulación sobre la posibilidad de que el Presidente Trump nombre un nuevo Presidente de la Reserva Federal antes de lo esperado aumentó las expectativas de un cambio hacia una política monetaria más acomodaticia. Paralelamente, nuevos informes económicos indicaron que la economía de EE. UU. se contrajo más de lo previsto en el primer trimestre, disminuyendo a una tasa anualizada de 0.5%, y el déficit comercial se amplió inesperadamente debido a una disminución en la actividad de exportación. En el sector tecnológico, empresas como Nvidia y Meta vieron ganancias sustanciales, manteniendo su momentum positivo, mientras que Apple se desvió de la tendencia, disminuyendo un 0.4% después de que JPMorgan Chase redujera su precio objetivo.