Los futuros de acciones estadounidenses recortaron sus ganancias iniciales pero permanecieron en territorio positivo el viernes, ya que los indicadores apuntaban hacia una desaceleración económica. Se esperaba que el S&P 500 y el Nasdaq 100 abrieran con un aumento del 0.4%, alcanzando niveles récord, mientras que los contratos del Dow avanzaban en 200 puntos. Datos recientes revelaron descensos inesperados en el gasto y los ingresos personales de mayo, junto con un aumento imprevisto en la inflación subyacente del PCE. No obstante, las acciones fueron impulsadas por las perspectivas de políticas comerciales relajadas y una mayor confianza respecto a los próximos recortes en las tasas de interés por parte de la Reserva Federal. El Secretario de Comercio, Lutnick, anunció que Estados Unidos había alcanzado un acuerdo comercial con China, lo que contribuyó al alivio de aranceles reducidos y a evitar posibles escaseces de materiales de tierras raras. Además, se sugirió progreso en las negociaciones comerciales con India, lo que indica un cambio en la postura de la Casa Blanca contra las barreras comerciales. Como parte de este cambio, el Tesoro decidió excluir el impuesto de la Sección 899 de la próxima legislación fiscal, alentando la inversión extranjera en los EE. UU. Mientras tanto, los futuros de Nike se dispararon un 10% tras fuertes ganancias, y las acciones de tecnología se beneficiaron del renovado apetito por el riesgo.